Provias dijo que con el paso de los años, disminuirían las curvaturas. (Miguel Idme)
Provias dijo que con el paso de los años, disminuirían las curvaturas. (Miguel Idme)

Una de las últimas obras inauguradas en por el ex presidente Ollanta Humala fue la vía Costanera, en el tramo Quilca-Matarani. La obra fue evaluada por peritos de la Contraloría, que hallaron deficiencias en el puente Quilca.

Según el informe 702-2017, emitido por el Departamento de Megaproyectos del ente de control, el puente presenta ondulaciones en la pista con valores superiores a los que recomendó el proyectista. Solo en esta parte de la superficie se invirtió 9.3 millones de soles.

Provias recibió la obra en noviembre de 2015. En primera instancia se firmó un acta donde se observaba que no había uniformidad en la vía, pero dos semanas después se firmó otro documento en el que se retiró ese cuestionamiento. Según la Contraloría, se vulneró el manual de diseño para carreteras.

Las observaciones a la vía, de acuerdo con los veedores, fueron desde que se estaba concibiendo el proyecto. Precisan que hubo deficiencias que no fueron corregidas en el diseño del puente. Añadieron que no hubo los estudios necesarios de suelos para determinar la cimentación del puente.

Otro cuestionamiento es que en la ejecución de obras, la constructora advirtió de problemas en la cimentación del puente, ya que se detectó la presencia de arena hasta a 50 metros de profundidad, lo que podría generar inestabilidad. Luego de seis meses de la observación, Provias aprobó que la constructora haga trabajos adicionales para subsanar deficiencias, lo que generó un gasto adicional de S/6.2 millones y que el plazo para las obras se amplíe en 99 días.

Este tramo fue dado a administración de Provias Descentralizado. Esta entidad informó a Perú21 que hacen trabajos de mantenimiento rutinario, que no hay riesgo para transportistas, que las ondulaciones en la carpeta asfáltica eran parte del diseño y que con el paso de los años disminuirían las curvaturas.