Con el sismo sentido la mañana del martes en la provincia de Ayabaca, los movimientos telúricos, en lo que va del año en Piura, llegaron a 30, cifra que representa el 50% de todo lo ocurrido durante el 2017 y que supera a la cifra de temblores del año 2016 que fue de 26.
Esta cantidad inusual de sismos preocupa a las autoridades del Comité de Operaciones de Emergencia Regional (COER) de Piura, quienes redoblarán esfuerzos por hacer trabajos de prevención y sensibilización en este tema.
El jefe del COER, Eduardo Arbulú, recordó que en la región hay un silencio sísmico de más de cinco décadas y por ser una zona sísmica en cualquier momento se podría producir un movimiento telúrico de gran magnitud.
“Nosotros tenemos programadas a nivel regional dos grandes simulacros de sismo y tsunami en julio y noviembre y reforzaremos el trabajo de prevención”, agregó. Recordó, además, que las zonas de Sechura y Talara (sobre todo el balneario de Máncora) son las zonas más propensas a este tipo de movimientos, pues albergan mayor cantidad de placas tectónicas.
Según el Instituto Geofísico del Perú (IGP) de los 30 sismos ocurridos en el presente año en Piura, 15 se produjeron en Sechura y cinco en Talara, cuatro de estos en Máncora.
PREVENCIÓN
Eduardo Arbulú, ante esta situación, señaló que continuarán con el trabajo de prevención y concientización de la ciudadanía, toda vez que los simulacros de sismos no son suficientes. “Hay que seguir alertas, ya que el riesgo sísmico está latente y siempre hay que estar prevenidos”, culminó.