Hay que aplaudir la –aunque desorganizada– decisión de Vizcarra contra el virus, aunque va a ser difícil que un Perú de tan vivir al día le obedezca. ¡Ojalá!

España es el ejemplo de cómo NO se debe reaccionar ante una crisis. Según un sondeo de ABC, el 80% de los españoles consideró “irresponsable” que el gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez haya permitido la manifestación “progre” feminista (100 mil asistentes) del domingo 8 de marzo en Madrid. No sorprende, ya que una de las causas de que esta plaga se haya extendido tanto desde la capital ha sido el contagio masivo que provocó esta estupidez demagógica de marchar con una epidemia encima. Hasta las esposas de Sánchez y de su socio comunista Iglesias se han contagiado. Como lo hizo la izquierda y el feminismo, la salvajada es minimizada. ¡Si hubiese sido la derecha!

Sánchez, desde el primer diagnosticado (31 de enero), no quiso ver la realidad. Tras subir salario mínimo, pensiones y sueldos estatales (¡a pesar del déficit!), solo se ocupó hasta el 9 de marzo de proponer temas populares y populacheros (emergencia climática, “diálogo” pomposo con los separatistas, descarbonización, “ley de libertad sexual”), ignorando o minimizando la colosal peste que se nos venía desde Italia. Entre el 5 y 7 de marzo se dedicó a promover la manifestación (“sin feminismo no hay futuro”, “hay que salir a llenar las calles”, “el brote está bajo control”). El domingo 8 de marzo ya había 674 casos y 17 muertos, pero igual marcharon. Sánchez se asusta el lunes 9 de marzo y comienza a tomar medidas de verdad. Hoy son ya casi 10 mil casos y casi 350 muertos. Como decía Jaime Bayly en la PUCP: “Tienes que ser bruto para ser de izquierda”.

PD: Me parece un exceso lo sucedido con el exministro L. M. Castilla. Otro más…