Buitre peruano que se respeta. (USI)
Buitre peruano que se respeta. (USI)

Ha muerto una voleibolista menor de edad por circunstancias que todavía no terminan de aclararse (“esclarecerse”, dice la prensa haciendo uso de un castellano cada vez más pomposo) y los gallinazos ya salieron a tragar sin ética, y escupir sin estética, los restos de un cadáver que sigue y sigue muriendo, hasta terminar en el olvido cuando ya no sea comidilla de nadie.

El jefe máximo de esta bandada es un zopilote de cuyo (tremendo) pico salen palabras absolutamente hirientes, discriminadoras e incitadoras de la violencia y aún así tiene micro, cámara, pantalla, y cada vez más pico. El rey buitre es insaciable y sus seguidores lo son más. Su daño constante es un tremendo negocio para ciertas antenas que se llenan los bolsillos con una audiencia cada día más ignorante y machista. Cuando veo al gallinazo hablar del caso no esclarecido de la voleibolista, siento –por muy machote que se le considere en el reino de los buitres ajusticiadores– que estoy escuchando a las amigas de mi abuela en el casino de Ancón, hace 40 años, haciéndose de la vista gorda sobre las andanzas de sus propios esposos, pero señalando con el abanico a las mujeres que se atrevían a vivir su sexualidad sin grilletes.

Veo ese tremendo pico despotricando contra el propio cadáver que devora y luego escupe para darle de comer al resto, culpabilizando a la víctima como corresponde a un machote que se respeta. “A ese bulín solo puede haber ido a tener sexo”, dice el buitre con complejo de cóndor. Bulín, qué palabra más antigua, me pregunto si el pajarote le dice cinema al cine o busing al metropolitano. “Qué triste vida”, grazna el carroñero, sin importarle que hay una familia entera, niños incluidos, que nunca encontrará consuelo pero al menos se merece que no llueva sobre mojado. Y como toda plaga, busca refuerzos. Entonces, invita a especialistas, pero no para escucharlos, sino para continuar con su cacareo barato: “Voy a utilizar una palabra dura, pero todo el mundo me va a saber entender”... Todo el mundo, súper limeñita expresión para referirse a esta aldea de pigmeos que seguimos siendo... “Si tú quieres ser la chica pendeja que te encamas con un patita a la primera noche, porque te gusta el sexo, porque te quieres sentir poderosa, o que dominas al tipo...” Dominar, claro, una mujer que no se comporta como una esclava siempre será una dominatrix. “Todo indica que la violaron”... “Jugó con fuego y se quemó”... “Juntó todas las figuritas para que la maten”... Se lo merece, sentencia el buitre, y sale volando a buscar cadáveres para rematar. El resto de zopilotes aplaude y pide más.