Kenji Fujimori
Kenji Fujimori

La política peruana se manifiesta tanto en las expresiones de sus protagonistas como en sus silencios. El decir presidencial de que no renunciará de ninguna manera al cargo se vio complementado con una frase ininteligible, afirmando que defenderá su permanencia en la Presidencia de la República “panza arriba”, como los gatos. Metáfora que nos desconcierta enormemente y nos deja patidifusos.

Quienes tienen mininos saben que estos se arquean, se erizan y emiten ruidos cuando quieren agredir o atacar. Están “panza arriba” cuando disfrutan del más absoluto relajo. En qué estado se encuentra el presidente, difícil determinarlo. Unos –la mayoría– lo ven con la soga al cuello. Él y su estrecho entorno se perciben más claros que agua de manantial.

Pedro Pablo Kuczynski calla y declara de acuerdo al momento. Se afirma que no hace caso a nadie, salvo –a veces– al ex premier Fernando Zavala.

Quien definitivamente está callada y por ello ausente de la política nacional es Keiko Fujimori, la lideresa de Fuerza Popular. Nunca habla y con su obstinado mutismo pierde liderazgo. Ella representó al partido nacional que más congresistas (73) ha tenido en la historia republicana. Actualmente va siendo desgajada como una naranja, color de su agrupación. El pacto de su hermano con el Gobierno está sellado a sangre y fuego. De hecho el presidente cuenta con ese respaldo.

El disidente Kenji Fujimori ha cumplido con su parte del indulto: garantizarle a PPK la mayor estabilidad posible, salvándolo de la vacancia y dividiendo a su ex bancada. Ya renunció un congresista keikista más para integrar el grupo de los ‘Vengadores’ (Avengers) liderado por Kenji.

El menor del clan Fujimori no está construyendo un partido, frágil o no. El compromiso de Alberto Fujimori con PPK es que no se alcancen los 87 votos que requiere la vacancia presidencial. Ahora son 11 kenjistas. Los ppkausas eran al inicio 18, ya se fueron cuatro. Difícil que vaquen a su ex jefe, aunque todo depende de que aparezcan más evidencias y papeles.

La tarea del líder de los ‘Vengadores’ parece apuntar a conseguir más parlamentarios que apoyen la permanencia de PPK. Afecta a su partido, pero el indulto pesa. El silencio casi sepulcral de la lideresa naranja la perjudica enormemente. Tal vez ella y su grupo piensen que esto la protege. Pero quiéralo o no, resulta perjudicial. El espacio vacío siempre se llena en política.

Otro ‘mudito’ en este panorama es César Acuña, el líder de Alianza para el Progreso (APP).

No critica ni apoya a Kuczynski y ya anunció su candidatura a la Alcaldía Provincial de Trujillo. Probablemente tentará la Presidencia. Si el Gobierno lo apoya, los ‘perritos’ disminuirán.

PD: Que sean 100 años, Luis Bedoya Reyes. ¡Feliz día!