(Luis Centurión)
(Luis Centurión)

El 21 de marzo, cuando el fujimorista Moíses Mamani presentó, junto a sus compañeros de bancada, los videos que destaparon una operación de compra de votos encabezada por el congresista Kenji Fujimori y su bloque, fueron estos lo que inmediatamente se ganaron la desaprobación del país por recurrir a prácticas montesinistas para intentar salvar de la vacancia al renunciante presidente Pedro Pablo Kuczynski. Sin embargo, desde ese momento, y sin exculpar a los kenjistas, el panorama ha variado y nos está mostrando a otro Mamani, distinto al ‘héroe’ que llenó de algarabía a su bancada.

El jueves pasado, el legislador nos sorprendió a todos al tomar un repentino vuelo a Brasil. Un día antes, el congresista debía declarar ante el Ministerio Público sobre el contenido de los videos, pero postergó la diligencia alegando que participaría en la Cumbre de la Américas que tuvo lugar en nuestro país. Si finalmente no acudiría al evento internacional para irse al extranjero, ¿por qué no dijo eso a los fiscales? El congresista de Fuerza Popular bien pudo explicar que tenía un viaje previsto porque ayer, a su retorno al Perú, dijo que había ido a tierras brasileñas a “relajarse”.

Pero lo más sospechoso de todo esto es que el Ministerio Público haya informado que los videos sin editar entregados presentarían algunas irregularidades. Advirtió que existen “desfases entre el audio y la imagen en varios archivos”. Por ello, ordenó una pericia de análisis digital para detectar “el mecanismo empleado para grabar –que no lo entregó Mamani al Ministerio Público–, así como si presenta edición o manipulación (los videos)”. Ante ello, Mamani ha negado que se haya editado alguno de esos videos y aseguró que los originales los entregó a su bancada antes de que sean remitidos al despacho del fiscal de la Nación, Pablo Sánchez. ¿Quiere decir que si hubo manipulación lo hizo Fuerza Popular?

Pero hay más en esta telenovela. A partir del material recibido, los fiscales pudieron conocer que en la grabación de los videos también intervino el legislador Modesto Figueroa, quien incluso grabó la reunión en la que aparecen los parlamentarios Kenji y Guillermo Bocángel. Mamani, además, dijo que tenía un video de PPK, aunque luego indicó que se le había dañado. No cabe duda de que el congresista tiene mucho que explicar a la Fiscalía.