César Villanueva | Premier (Presidencia)
César Villanueva | Premier (Presidencia)

Desde que arrancó este quinquenio no se había visto similar entusiasmo en las bancadas del Congreso ante la presentación de un gabinete ministerial por el voto de confianza como el que se observa hoy con el equipo de Villanueva.

Durante la gestión del renunciante presidente Pedro Pablo Kuczynski, había resistencia marcada de parte de agrupaciones como Fuerza Popular y el Frente Amplio, las cuales siempre encontraban alguna excusa para darle un respaldo claro a su premier de turno. Finalmente, si había apoyo, este se daba a medias. Pero hoy no vemos ese tire y afloje.

Hasta el momento, solo Alianza para el Progreso ha adelantado, tras reunirse con el premier, que le dará el voto de confianza a su Consejo de Ministros. Para algunos puede ser una postura obvia, ya que César Villanueva pertenece a ese bloque político, pero, hace solo unas semanas, miembros del fujimorismo –como Miguel Torres, quien es el subsecretario del partido naranja– ya le habían expresado su apoyo. El pasado lunes, además, el vocero de Acción Popular, Víctor Andrés García Belaunde, uno de los opositores más acérrimos a PPK, manifestó su confianza en que el discurso de Villanueva del 2 de mayo será “eficiente, efectivo y transparente”. Eso sí, le aconsejó desmarcarse claramente de todo lo que represente la gestión pasada. Recomendación válida en el contexto en que PPK dejó el poder.

Con este escenario, claramente a su favor, podemos decir que el gobierno de Martín Vizcarra tiene más espacio de acción. Y aparentemente tiene también mejor capacidad de reacción porque, ante el primer escándalo que tuvo que enfrentar, el del alquiler de un local para OSCE por S/15 millones, supo cortar por lo sano y de manera rápida.

Teniendo, al menos por el momento, el viento de su lado, el premier quizás no encuentre tantas trabas cuando solicite las facultades legislativas. Como el mismo Villanueva dijo, la prioridad con este pedido es la pronta reconstrucción del norte del país. Esperemos que el desencanto no llegue tan rápido pues se necesitan leyes para impulsar la reactivación económica del país, para acelerar la reconstrucción del norte y para intentar hacer una que otra reforma importante en Educación, Salud o Trabajo.

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