Mi lectura es que la dirección de los esfuerzos del gobierno es correcta. El problema está en la rapidez de la implementación. Creo que eso es clave porque, para los 5 millones de personas que viven al día y que no son beneficiarias del bono, se hace imprescindible que haya una respuesta más rápida. Aumentar en 15 días la cuarentena implica que el gobierno tenga que hacer un rescate casi masivo de la economía peruana, tanto por el lado de los compradores como por el lado de los vendedores, las pequeñas y medianas empresas que concentran más del 70% del empleo en el Perú. Es la única manera de evitar que se rompa la cadena de pagos.

Si eso se interrumpe, los negocios comienzan a caerse, con lo cual el desempleo aumenta. En segundo lugar, las personas, al no tener ingresos, tienen menos dinero para comprar, con lo cual la demanda se contrae. Lo que se tiene que hacer, y por eso digo que está en la línea correcta, es evitar la ruptura de la cadena de pagos.

El principal problema con el que se enfrenta el gobierno es la falta de información, cómo sabes quiénes son los independientes. Mi idea es que en lugar de invertir tiempo, hay que darles a todos. Hay que pecar por exceso pero no por defecto. Hay que calmar la desesperación.

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