Camilo recordó parte de lo vivido esa noche cuando fue amordazado y amenazado por un grupo de tres encapuchados que vestían ropa de camuflaje y portaban armas blancas. Ellos amenazaron con cortarle uno de sus dedos si no decía dónde escondía los objetos de valor. Después de permanecer cuatro horas amarrado, el cantante se habría liberado para ir rápidamente hasta la policía, donde dio su manifestación. Se rumorea que las pérdidas ascienden a 3 mil euros.