PLENO DEL CONGRESO (MARIO ZAPATA)
PLENO DEL CONGRESO (MARIO ZAPATA)

La mayoría de peruanos desaprobamos desde hace décadas la gestión del Congreso –que hoy solo es aprobada por 19% (Ipsos, mayo 2018)– y repudiamos el bajo nivel parlamentario. Asimismo, solemos sentir que los congresistas no nos representan. En un análisis comparativo de la región entre 1995-2015, Perú figura en la cola de la aprobación de su Parlamento y registra el más bajo índice de sentimiento de representación política del Congreso, por parte de su ciudadanía, con solo 8% (Latinobarómetro, 2015).

Sin embargo, más allá de nuestros rechazos generalizados, me animo a decir que, en muchos aspectos, el Congreso es una certera representación nacional de nuestra sociedad.

Por un lado, la cotidiana ilegalidad impune. Por ejemplo, congresistas difamando sin reparos, al mismo tiempo que miles de conductores incumplen normas de tránsito sin sanción alguna.

Asimismo, el bajo nivel educativo también se encuentra bien representado por la mayoría de bancadas. No solo apunto a la limitada formación e instrucción, sino también a las formas en que nos comunicamos.

La informalidad tan arraigada en nuestra sociedad, que incluye desde prácticas laborales hasta la impuntualidad, encuentra también una gran representación (veamos las constantes denuncias de los asesores y la falta de quórum en los horarios de inicio en las comisiones del Congreso).

Es cierto que el Congreso –a pesar de algunos políticos honestos, inteligentes y productivos– es una institución que tiene bien ganado su poco prestigio, pero también es cierto que –en muchos aspectos– es la representación nacional de lo que somos como sociedad.

Probablemente sea una versión en la que destacan más nuestros defectos que nuestras virtudes, pero eso no quita –aunque duela admitirlo– el hecho de que, como sociedad, en diversos sentidos y no en pocas oportunidades, nos comportemos como el Congreso.

Nos toca ser una mejor sociedad a ser representada y, sobre todo, elegir mejor para reflejar más virtudes que defectos.