FORTALEZA (AFP).– La Policía y manifestantes se enfrentaron en Fortaleza (noreste) durante la semifinal entre España e Italia por la Copa Confederaciones, mientras la presidenta Dilma Rousseff consiguió el apoyo de líderes de la coalición de gobierno para un plebiscito que reformaría el cuestionado sistema político brasileño.
Según la Policía, unos 5,000 manifestantes marcharon hacia el estadio Castelao de Fortaleza cuando algunos comenzaron a lanzarle piedras a la Policía, prendieron fuego a neumáticos e intentaron derribar las barreras metálicas que les bloqueaban el paso. Los agentes los dispersaron con gases lacrimógenos y detuvieron a 72 personas.
En la capital Brasilia, Dilma Rousseff se reunió con presidentes de partidos de la coalición de gobierno, con quienes hubo «gran convergencia» sobre la realización de un plebiscito que establezca nuevas reglas para la financiación de campañas electorales y revise el sistema de la votación.
