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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

alevy@ambiand.com

La primera vez en mi vida que vi un rayo fue una noche de verano en Lima en 1973. Desde entonces, recuerdo 4 o 5 veces más que esta condición se ha producido sobre nuestra capital. Es raro, pero puede suceder. Este año aún más. Esta semana que termina, los pobladores de Nuevo Chimbote tuvieron la oportunidad de observar rayos en el cielo nocturno acompañados de una lluvia ligera de verano. Más aún, en los últimos días, tormentas formadas inusualmente a bajas alturas en la sierra se han observado en Arequipa, donde la ciudad ha registrado múltiples descargas eléctricas casi todos los días de la última semana, mientras que poca lluvia se observaba en la alta sierra, donde más se necesita para llenar las represas. Están interactuando una serie de condiciones de viento y humedad que explican la ocurrencia de lluvias ligeras en la costa y la eventual observación de rayos o relámpagos sucedidos de sus sonoros truenos. Estamos ya en la mitad del verano y ese patrón de lluvias, que no se forman en las nacientes de los ríos, donde están nuestros reservorios, aparenta continuar en los siguientes días. El resultado será más angustia para el llenado de las represas de Arequipa, pero más lluvias cerca del litoral y quizá nuevas ocurrencias de rayos en la costa.