Primeros auxilios psicológicos: Salud mental y prevención del suicidio. (GETTY)
Primeros auxilios psicológicos: Salud mental y prevención del suicidio. (GETTY)

EPISODIO 8

¿Te ha pasado alguna vez, que sientes tanta vergüenza de contar lo que te sucede, que prefieres aislarte y no pedir ayuda? ¿O, quizá la ansiedad o la depresión que te aqueja te inducen a alejarte de las personas que te quieren? En realidad, la tendencia al aislamiento cuando nos sentimos mal es muy, muy común, pero, no por eso, saludable.

Nuestros pensamientos pueden decirnos: “no le cuentes a nadie, es mejor que lo vivas en soledad”, “no la llamas hace mucho tiempo, entonces, ¿por qué hacerlo ahora?, sólo incomodarás”, “nadie puede saber lo que te pasa pues muchas personas te conocen y no puedes quedar mal”, “realmente nadie te va a entender, o más probable es que te juzguen pues nadie es realmente tú para comprender cómo te sientes y lo que te pasa”.

Si has pensado algo así, entonces recurre a este primer auxilio psicológico: No actúes esas ideas. Quizá no las puedas dejar de pensar, pero no las actúes, y, más bien, has todo lo contrario: llama o escribe a esa persona que sabes que estará ahí.

Las investigaciones y estrategias terapéuticas contemporáneas tienden a ser concluyentes con respecto al aislamiento: suele verse en diversos estados de sufrimiento emocional, pero, especialmente, en depresión e ideación suicida.

Por ello, si has pensado en acabar con tu vida, te pido que, por favor, no te aísles ni mantengas en secreto lo que piensas. Puedo entender totalmente que sientas que es extremadamente difícil compartirlo con otras personas o pedir ayuda, pero realmente es imprescindible que lo hagas, pues las personas que te quieren desearían conocer esa información para poderte apoyar. El aislamiento no mejorará nada, ni para ti ni para quienes te quieren y desean ayudar.

Tenía mucho miedo de contarle a su hermana que había pensado en ya no vivir más y por eso se aislaba y permanecía en silencio, creía que decírselo complicaría las cosas, pero, cuando lo hizo,, ella solo lo abrazó y le dijo: vamos a salir de esto juntos, yo te ayudaré siempre. No estás solo.

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