(Foto: Selección Peruana)
(Foto: Selección Peruana)

Una derrota que duele, pero más que, por el resultado en sí, golpea por la forma en que se dio, por una pésima decisión del árbitro brasileño, Daronco, que no dio por válido un gol peruano que nace de un disparo de larga distancia de Miguel Trauco, quien, al rematar desde aproximadamente 35 metros, encontró adelantado al arquero Rochet, que contuvo el balón, pero que ingresó al arco con él al dar dos pasos hacia atrás ¿y el VAR dónde estuvo? Al parecer ni siquiera llamó a consulta al árbitro, y el árbitro tampoco quiso consultar nada. ¿Por qué? ¿Acaso no se busca justicia y transparencia?

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Las Clasificatorias se juegan con todo, son partidos cerrados y muy luchados. Pero es de esperarse que, por lo menos, existan arbitrajes regulares, y no podemos llamar otra cosa que mediocre al que tuvo Perú con este juez brasileño, porque con su decisión, apañada por los jueces del VAR, cambian el resultado de un partido que ya tenía muy poco para terminar. Así se nos vino a la mente el árbitro chileno Bascuñan y otros más que perjudicaron a Perú en este difícil camino a Qatar 2022. Aquí preguntamos ¿y la FPF? Bien, gracias. Un dato, este señor Daronco ya arbitró otras veces en estas mismas Clasificatorias al seleccionado uruguayo y descontentos ellos no quedaron, al contrario.

En cuanto al partido, dejando de lado estos momentos turbios, Perú tuvo un mejor primer tiempo que segundo. En muchos pasajes controló las acciones en mediocampo cuando decidió marcar lejos de su propio arco. Lapadula alcanzó dos chances claras, a los 4 y a los 11 minutos, el primero de cabeza ante centro de Carrillo rematando al cuerpo del portero y otra donde roba un balón y lanza un tiro que también es controlado. Uruguay tuvo una muy opción clara al finalizar el primer tiempo y logró convertirla vía De Arrascaeta, que consigue el gol luego de un tiro que pega en el horizontal.

En la segunda parte, el equipo de Ricardo Gareca no fue mejor. Los ingresos de Ormeño y Calcaterra aportaron poco. Flores intentó, lo mismo que ‘Canchita’ Gonzales y Valera, pero ya los celestes defendían hasta con los recogebolas que escondían las pelotas. Así terminó el partido, con el sinsabor de que se pudo haber encontrado otro resultado. Ahora viene el martes Paraguay y lo bueno es que el seleccionado peruano sigue dependiendo de sí mismo, aunque solo sirva el triunfo.

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