Pedro Pablo Kuczynski tenía licencia en el partido político. (Perú21)
Pedro Pablo Kuczynski tenía licencia en el partido político. (Perú21)

Cuando Pedro Chávarry, ex fiscal de la Nación, cesó a dos fiscales del promocionado Equipo Especial, el presidente Vizcarra retornó a la velocidad del rayo desde Brasil, cancelando su participación en la juramentación presidencial de Jair Bolsonaro.

Hoy el país está afectado por fuertes lluvias y los huaicos no cesan, pero el presidente no dudó en embarcarse a una visita oficial a España y Portugal. Tampoco asistió al concierto Venezuela Aid Live, realizado en Colombia para darle aliento a ese sufrido país.

La situación es grave porque la prevención en 2017 no funcionó. Huaico sobre huaico es como desgracia sobre desgracia, doblemente nocivo. Asimismo, Chosica y Chaclacayo corren tremendo peligro por la activación de varias quebradas, pero el flamante alcalde de Lima viajó también a España y a Londres.

La negligencia con la reconstrucción, el copamiento del Poder Judicial evidencian que el gobierno ‘pepekausa’ desinstitucionalizó al Perú. La zapa la inició el régimen humalista, el actual sigue ese estilo. Luego del frágil triunfo ‘pepekausa’, el periodista Aldo Mariátegui dijo a Perú21: “Se juntó un grupo de independientes, se tiraron al mar y el viento los empujó”.

Estos aventureros también destruyeron el Congreso alterados por la amplísima mayoría fujimorista. Del saque el presidente Kuczynski dijo a El País que sacarían a parlamentarios de Fuerza Popular para debilitarlos. La primera moción de vacancia presidencial trajo lo obsceno: se subastaron conciencias y se pervirtió la política. La segunda fue el ‘despiporre’, se filmó la compra y venta de parlamentarios y el ofrecimiento de obras y diezmos. En suma: corrupción por voto.

El artífice fue el congresista Kenji Fujimori, liderando este mercado vil. Pero el actual régimen superó al anterior. Conversó, pactó –no es ilegal– con los fujimoristas para asumir la presidencia. Luego vino un caballo de Troya. Sometió, sabe Dios cómo, al presidente del Congreso, antaño fujimorista, diezmando a esa bancada con cuanta acusación es posible.

Hoy la ‘bankada pepekausa’, si podemos llamarla así, implosionó junto con otras. Hay de todo, congresistas sin partido, pero con bancada, con todos los derechos, que menosprecian a la agrupación que los invitó. Ebrios de independencia forman sus grupos, reclaman todo y además quieren instalar un nuevo régimen para las comisiones, ya, ya.

Los ‘pepekausas’ del partido corren el riesgo de ser echados de su propia ‘bankada’. No solo se envileció la política, sino que desmoronaron la institución parlamentaria, indispensable en democracia. Pero el acuerdo con Odebrecht pasó solapa. Como en el tango, un cambalache donde “vivimos revolcaos en un merengue y en el mismo lodo todos manoseaos”.