[Opinión] Aldo Mariátegui: Castillo con extremaunción. Foto: Presidencia
[Opinión] Aldo Mariátegui: Castillo con extremaunción. Foto: Presidencia

-¿Estas marchas son espontáneas o hay alguna mano siniestra detrás? ¿Podrían provocar la caída de Castillo (Moody’s ya le aplicó ayer la extremaunción) o una Constituyente demencial? ¿Estas masas provincianas quieren rebaja de precios, más rojerío o simplemente aprovechar para robar lo que sea? Una de las peores cosas que podría suceder es que un militar de rango medio y rojimio termine hacienda un Locumbazo o un Andahuaylazo, a la Humala. Serenos, morenos. Cabeza fría.

-No es tampoco de mucho extrañar esta agitación callejera que convulsiona nuestro país. Ya he venido advirtiendo hace rato que el impacto de la guerra en Ucrania nos iba a golpear cada vez más, dado que esa estúpida aventura bélica de Putin ha afectado seriamente la oferta mundial de hidrocarburos y alimentos. Eso se suma a emisiones planetarias de liquidez muy grandes para combatir los efectos del COVID sobre empleo y consumo, además de distorsiones en la oferta (chips, gas, etc) y distribución (fletes) generadas por el virus que recién se estaban superando. Ante eso, es injusto culpar a cualquier gobierno del fenómeno, como también es iluso pensar que con subsidios, aumentos de la RMV, baja de impuestos y otras medidas se va a acabar con el problema. Algo aliviarán esas medidas, pero tan solo son aspirinas. De lo que sí se puede culpar a Castillo es de su falta de reflejos y su indiferencia ante lo que se venía: esta izquierda ha actuado peor que el más frívolo y aristocrático gobierno de derechas. Castilla superó a Manuel Prado.

-¡Qué distinta la cobertura televisiva de estos desmanes a la que hubo con Merino! Estoy de acuerdo en que no hay que azuzar a esta turbas, pero eso tampoco debió hacer Canal 7, Latina, el Canal N ospinista, RPP y otros con Merino. Tampoco los muertos en manifestaciones bajo Castillo y Sagasti generaron las seudoresponsabilidades cargadas sobre Merino. El doble rasero de siempre.