BENEFICIADA. Esta vez, el juez de Chivay le dio la razón a Rosario. (USI)
BENEFICIADA. Esta vez, el juez de Chivay le dio la razón a Rosario. (USI)

Redacción PERÚ21

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El juez de investigación preparatoria de Chivay, Jean Carlo Torreblanca, le ordenó ayer a la fiscal María del Rosario Lozada, quien investiga la desaparición y muerte de Ciro Castillo Rojo, que en un plazo de 10 días le muestre a la defensa de Rosario Ponce , acusada por la muerte del estudiante universitario, los guantes hallados cerca del cadáver de este.

En una audiencia realizada ayer en Chivay (Caylloma) para atender la queja de los abogados de la joven, Torreblanca sostuvo que se vulneraron los derechos de defensa de esta, sobre todo tomando en cuenta que los guantes son considerados una pieza clave para la acusación fiscal que se sigue contra la muchacha por el delito de homicidio agravado.

El adjunto de la Segunda Fiscalía Penal Corporativa, José Luis Tito, manifestó que apelará la resolución del juez de Chivay por cuanto los mencionados guantes están en Lima, donde continúan las pericias. Sin embargo, el juez señaló que el tiempo para las investigaciones había sido "excesivo".

En la audiencia, los abogados de Rosario Ponce se quejaron de que la Fiscalía no les permita hacer una adecuada defensa al no mostrar otros elementos importantes, como las fotografías del recojo de evidencias halladas cerca del cadáver de Ciro.

El abogado Miguel Cabrera dijo que solo les han entregado las fotos de las diligencias del levantamiento del cuerpo. No obstante, el juez de Chivay desestimó ese pedido.

Torreblanca también declaró improcedente el pedido de la defensa de archivar la investigación preparatoria, pero indicó que, pasada la ampliación de 60 días, no podrá haber más prórrogas y la fiscal deberá formalizar la acusación.

DATOS

- Existe polémica respecto al guante hallado en la mano izquierda de Ciro.

- La Fiscalía sostiene que la prenda no presenta rasguños, lo que probaría que el joven no se resbaló, sino que fue empujado. Pero la defensa de Rosario afirma que el guante estaba roto.