[OPINIÓN] Richard Arce: “¿Quién dice que es un fracaso?”

Voy a seguir insistiendo en que es determinante para el futuro del país una lectura ponderada del balance de la protesta, porque, una vez más, salen voces altisonantes para descalificarla, al extremo que son las mismas autoridades las que insinúan un fracaso.

Lo dije con antelación, que la convocatoria no iba a tener el caudal de personas movilizadas y que se veía que eran factores externos a las estrategias del gobierno las que iban a propiciar una movilización menos numerosa; pero que no por ello se debía desacreditar esta respuesta ciudadana, como lo hizo el propio gobierno tratando de descalificarla, incentivando el miedo y propiciando el psicosocial de asociar la marcha con el terrorismo.

Después del papelón que hicieron en días previos, quisieron enmendar la estrategia con un mensaje más conciliador, que era en realidad la mejor estrategia, pero evidentemente fue muy tarde porque ya la protesta había tomado cuerpo a nivel nacional, tal como se visibilizó en diferentes regiones y en la marcha en Lima.

Solo por esa falta de capacidad para afrontar la conflictividad, el gabinete Otárola ya debería estar fuera, ya no es un soporte para el gobierno; al contrario, es un lastre. Eso sin contar la responsabilidad política que tiene con los hechos luctuosos de las protestas de inicios de año en el sur y que evidencia casos de violaciones a los derechos humanos.

Si tuviéramos un gobierno de estadistas, se daría cuenta inmediatamente de que esta protesta no es un fracaso, al contrario, es una muestra de la indignación ciudadana y la crisis de representación política que se está viviendo en el país; pero también es una gran oportunidad para revertir la situación y utilizar la misma fuerza que tiene para convocar en varias regiones para que se pueda atender una serie de demandas sociales.

Ayer se intentó algo, con la convocatoria de las principales autoridades del país para presentar la Autoridad Nacional de Infraestructura. Claro, hubiera sido más interesante si lo hacía en alguna ciudad del sur y con convocatoria de autoridades locales.

Tienen que entender que el mayor logro de la marcha ha sido la convocatoria de diferentes sectores sociales, ya no hubo el predominio de radicales o castillistas, hubo pluralidad en la manifestación ciudadana, que sale indignada por los atropellos que comete el Congreso con el aval del Ejecutivo.

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