Se viene junio, el mes más duro para estas inclemencias del tiempo, súmenle la negligencia en la compra de urea, la anunciada crisis alimentaria y los efectos de la invasión a Ucrania. La situación es nada promisoria, al contrario, se vienen momentos álgidos que ponen en riesgo la seguridad alimentaria, porque el sur vive de su producción agrícola al igual que todo el Perú. Están avisadas las autoridades para prever la hambruna que se nos viene.