Esta semana, el ministro de Economía, Kurt Burneo, agitó el avispero con sus comentarios sobre los riesgos recesivos que el país enfrenta. Si bien la data no revela que estemos marchando rumbo a una recesión, al menos no en el corto plazo, lo que sí veremos en el segundo semestre será una fuerte desaceleración del consumo, acompañado por una importante caída de la inversión privada, que será inclusive más pronunciada el próximo año.