La incertidumbre paraliza, es mejor quedarme a esperar y ver qué sucede, tal vez las cosas mejoren y el Gobierno haga algo, y esto se reactive. No, esto cambió, necesitamos perder el miedo a lo desconocido o a lo nuevo. Si el Gobierno hace algo que reactive todo, eso no lo controlas. Busquemos nuevas opciones. Hace unos días me llamó un distribuidor de cerveza de Iquitos, un extraordinario empresario, para decirme: “no puedo esperar, tengo que distribuir alimentos, abarrotes y otros artículos, tengo gente y costos que solventar, dame una mano”. Buscamos otros proveedores y en una semana ya está distribuyendo leche y en los próximos días una serie de productos de primera necesidad. La incertidumbre genera miedo y el miedo genera inacción.