Evo Morales regresó a Lima para el lanzamiento del nuevo partido del presidente Castillo y recomendar que la Asamblea Constituyente era la voz. Veamos qué tal le fue en Bolivia.
En 2008, tras muertos y enfrentamientos, se incluyó un artículo en la nueva Constitución boliviana solo para dejar constancia de que el periodo de gobierno 2006-2010 sí contaba como un primer gobierno y solo había una reelección inmediata. Ya en el segundo periodo, empezó la historia de que el primer periodo no contaba: la misma interpretación auténtica de Fujimori. Su Tribunal Constitucional le permitió un tercer mandato y en 2016 armó referéndum para conseguir un cuarto y perdió con las justas. Lo demás es historia reciente y conocida. Si existe el conjunto de pelotudeces democráticas, debe existir el de pendejadas antidemocráticas, y ahí parece que nos ubicamos.
Veamos ahora si la Constituyente de Bolivia ayudó a los pobres. Entre 2006 y 2019, la pobreza en Bolivia bajó 23 puntos, pero Perú la redujo en 35 puntos con la Constitución actual. Bolivia se endeudó más que el Perú: 55% del PBI en deuda pública bruta versus 26% en Perú. Su déficit fiscal fue de 6.5% del PBI, mientras que en Perú era 2.6%. El PBI boliviano creció 4.7% anual en promedio, pero Perú creció algo más: 5.1%. En 2019, Perú tenía dos veces y media las Reservas Internacionales Netas que tenía Bolivia. Y su informalidad en el empleo era mayor que en Perú también. Las cifras no cuadran tanto. Pendejada antidemocrática con pelotudez socioeconómica pinta a mala recomendación. La evidencia no parece importarle mucho a don Evo. Dijo en Lima que está convencido de que la pandemia es parte de una guerra biológica vinculada al capitalismo e imperialismo que exporta armas nucleares, armas químicas y hasta biológicas. Nadie que tenga real respeto por su audiencia afirma algo así de grueso sin preocuparse al menos por aportar indicios razonables. Ego no le falta a don Evo.
Otra persona con afirmaciones tremendas para las que reconoce no tener evidencia pero sí convicción es el canciller: dice que Sendero Luminoso ha sido en gran parte obra de la CIA y los servicios de inteligencia, según declaraciones del 27 de febrero de este año. Y no es algo que pueda tomarse a la ligera para el cargo que ocupa.
Pero la relación entre hipótesis y necesidad de evidencia tiene otro extremo. Pruebe con un niño pequeño el siguiente acertijo: hay dos hombres hablando por teléfono, y uno le responde al otro que no puede porque está misio, ¿qué cosa le pidió? El audio entre el primer ministro Bellido y Arturo Cárdenas no admite mucha interpretación. Pero en ese caso, cuyas implicancias no son menores, la respuesta es que hay que esperar a que todo se pruebe (y son 200 mil audios). Oscurantista este nuevo Medioevo.