Cualquier economía tiene cuatro motores: el consumo privado, el gasto público (consumo público más inversión pública), la inversión privada y las exportaciones. Cuando una empresa pequeña, mediana o grande, señala que “no le va bien porque no le están comprando”, se está refiriendo a alguno de los motores señalados. Imaginemos que usted tiene un pequeño restaurante; mejorar sus ventas significa que las personas aumentan sus gastos de consumo en su negocio; si tiene, por ejemplo, una pequeña distribuidora de cemento, dirá que le va bien si le compran más cemento; en ese caso, quien le compra no será un consumidor, sino un inversionista. Por último, si usted tiene como mercado el exterior, digamos que vende cacao a Suiza, la evolución de su empresa dependerá de que los compradores suizos mantengan y/o eleven sus compras.