Pedro Castillo. (Foto: archivo Presidencia)
Pedro Castillo. (Foto: archivo Presidencia)

Resulta aburrido escribir todas las semanas sobre las tropelías del peor gobierno que hemos tenido en nuestra historia republicana. Está claro que Castillo no va a poder culminar su mandato, pero la pregunta es ‘¿y después qué?’.

No hay un líder en la oposición que haya logrado captar la decepción de la población ante el actual régimen. El más activo es López Aliaga, pero no cuenta con un respaldo masivo por sus posiciones conservadoras que no son atractivas para los segmentos jóvenes. Por eso las protestas no han ido creciendo ni han sido masivas.

No nos olvidemos que, en las manifestaciones contra Fujimori y Merino, fueron los jóvenes los que tuvieron una presencia determinante que llevó a la caída de ambos regímenes. Para los millennials, el cambio climático, la protección de los animales, los temas de género y otros son asuntos de su interés y que están ausentes en la agenda de los que pretenden encabezar la oposición.

MIRA: [Opinión] Carlos Bruce: ¡Una nueva ley de contrataciones del Estado, ya!

Por otro lado, está el tema de la sucesión presidencial que coloca a Dina Boluarte como jefe de Estado una vez vacado Castillo. Ni tonta, va a asumir posiciones más moderadas y tratará de nombrar un gabinete con personas sin cuestionamientos, si logra encontrar quien le acepte, para tratar de mantenerse en el cargo.

Mientras tanto, la derecha conservadora y la liberal seguirán desunidas. El video de López Aliaga contra Keiko es un ejemplo, y esa incapacidad de ir juntos los dejará fuera de juego nacional limitándose al ámbito municipal y regional.

La salida no va a ser ni fácil ni rápida y los errores servirán para aprender a construir consensos y a representar en su integridad todas las inquietudes de la gente y no solo las que nos acomodan.

VIDEO RECOMENDADO

Perú Libre contrató a hacker para borrar archivos de los Dinámicos del Centro
El informático contratado por Perú Libre se copió 850 carpetas y ahora tendrá que entregarlas. Además, Indecopi quiso dejar a millones de familias sin panetón. También, Congreso censuró al ministro de Educación, Carlos Gallardo. Y, Pedro Castillo pidió la cabeza del fiscal que fue a Palacio a investigar.