-Sería realmente un escándalo que este Gobierno acceda a las peticiones de Petroperú y le desembolse, de varias maneras, esos US$2,500 millones que esta empresa parasitaria le está solicitando para sobrevivir un tiempito más. Petroperú está quebrada y allí no queda más que dejarla morir. Que sus irresponsables acreedores ya vean como se cobran sin que el Estado peruano responda por este parásito, porque nadie va a asociarse o comprar a ese muerto. Que rematen la refinería, el edificio de San Isidro y algún activo más que se pueda vender.

-Se murió Gonzalo García Núñez. Como la historia se trata precisamente de enjuiciar, con justicia y objetividad, a los muertos, tengo mis comentarios sobre el finado (como seguramente los rojos los tendrán conmigo en su momento, que sonriente anticipo que serán implacables y feroces. Si al pobre Suárez-Vértiz le han escrito cada salvajada). GGN fue rojo y maloso, típico exponente del grupete de Mohme y Siomi. Sectario, me impidió, junto a sus aliados Pablo Talavera (caviarazo) y Gastón Soto Vallenas (oportunista y medroso), participar en un caso que ese CNM controlado por la caviarada investigaba sobre el juez San Martín, siendo yo precisamente la víctima. Estos ni siquiera guardaron las formas mínimas y no me dejaron ni exponer. Eso fue un abuso por donde se le vea. Y por supuesto que estos pájaros absolvieron a su ídolo CSM de ese y varios casos escandalosos más. Y qué decir de sus resentidas posiciones políticas.

Tuve la suerte de encontrarle una mañana en la calle Miguel Dasso y soltarle todo, todo lo que pensaba de él mientras se escabullía presuroso. Mañana seguramente la izquierda lo pondrá en un altar y La República afirmará que fue un sabio, un luchador social, un gran tipo, etcétera… Como no puedo hablar nada bueno de él, no comentaré nada más y que descanse en paz (la paz que no le dio a Richard Webb en el BCR cuando fue director allí).

PD: Jueza Elvia Barrios, cumpla con ejecutar el fallo del TC que tengo a favor.