(Facebook / Figuritas Perú)
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Santiago Pedraglio

spedraglio@pucp.pe

La muerte de Daniel Peredo ha conmocionado el ambiente deportivo y a amplios sectores no necesariamente hinchas del fútbol. La pregunta surge por sí sola: ¿por qué tanta gente tan afectada? Es posible que haya una identificación con su estilo de ejercer el oficio y con su manera de transmitir sentimientos tan intensos como los que explotan en un gol clave, en una jugada decisiva al filo de una final caliente o en la mención a un jugador tan querible como el ‘Orejas’ Flores o al tan admirado José Paolo Guerrero Gonzales.

Creo, además, que la afición futbolera y la gente que, sin serlo, lo conocía por la televisión o la radio admira en Peredo a una persona que hace su trabajo con rigor y seriedad. Estaba bien informado y opinaba con claridad, rasgos reconocibles desde sus inicios en el periodismo televisivo. Además, no requería insultar para hacerse escuchar. Intensamente apasionado –nadie puede narrar los goles en la inmediatez del momento como él lo hacía sin serlo–, al mismo tiempo que sensato y prudente, sin apelar a la descalificación fácil.

Esta mixtura de apasionamiento, sensatez e imaginación imprimió a su narración momentos memorables. Peredo escribía muy bien, opinaba con corrección y sabía cuadrarse cuando debía debatir; pero ha sido en su voz, sus gestos y sus frases donde quedó impregnado lo más intenso de su vínculo con la gente y los propios futbolistas, más aún durante la reciente clasificación al Mundial. No por gusto sus frases célebres, dichas por él en los momentos de máxima emoción, se recuerdan reiteradamente en estos días.

Daniel Peredo muestra que es posible ganarse el cariño conectándose con lealtades que la gente, amantes o no del fútbol, saben reconocer como auténticas. Por ejemplo, era válida –y fue valiente, en su momento– su apuesta por que la selección fuera al Mundial. Por todo esto, y como lo han pedido muchos de sus colegas, a Daniel –a quien no conocí personalmente– hay que despedirlo no con un minuto de silencio sino con #AplausosparaPeredo.

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