Diethell Columbus: Gallina que come huevo…

El año pasado se declaró la inconstitucionalidad de una parte de la Ley N° 30057 que establecía que los trabajadores del BCRP, SBS y del Congreso estaban exceptuados de formar parte del régimen del servicio civil. El criterio del TC fue que la mencionada excepción no se sustentaba en razones valederas que justificasen que este grupo de trabajadores deban tener un trato “privilegiado” en el aparato público. A partir de la sentencia, todos formarían parte del régimen de la Ley N° 30057 (tiene sentido, ¿no?).

Cabe señalar que esta decisión jurisdiccional puso coto a las exclusivas gollerías económicas y laborales de las que gozaban los servidores de estos pequeños feudos estatales. No obstante, y como era de esperarse, los titulares de las instituciones “perjudicadas” no solo criticaron a su conveniencia la sentencia de inconstitucionalidad sino que además hicieron gestiones ante el Parlamento para que a través de una nueva ley se les restituya aquello que, según ellos, se les había arrebatado.

¿Acaso resulta tan difícil entender que el beneficio del que gozaban es inconstitucional?

Queda claro que el mandato del Tribunal Constitucional no significó mucho para el Congreso de la República o no entendieron sus alcances, pues la semana pasada promulgaron la Ley N° 30647 que, entre otras cosas, restituyó el régimen excepcional que beneficia solo al grupo de servidores públicos de las instituciones citadas, vale decir, habrían vuelto a legislar en contra del ordenamiento constitucional vigente.

Esperemos que el Tribunal Constitucional haga respetar sus fueros, caso contrario quedará sentado un nefasto precedente.

Finalmente, y ante la reticencia de respetar los fallos judiciales: ¿cuál será la reacción del Congreso de la República si se declara la inconstitucionalidad de la ley antitransfuguismo? Ya estamos advertidos del posible desenlace.
P. D. ¡Feliz 15° Aniversario, Perú21! y ¡Feliz cumpleaños, papá!