Daniel Peredo
Daniel Peredo

Prematura y conmovedora partida de Daniel Peredo. Esta no es una columna política-económica, mi vena futbolística me gana como hincha del fútbol y Peredo.

Daniel falleció en su ley. Tras pichanga futbolera (su pasatiempo favorito), arrancando la semana. Goles gritados con alma y corazón más que con la voz, ese corazón dejó de latir el 19 de febrero, meses antes del Mundial que le hubiese permitido cumplir su máximo deseo: gritar gol peruano en Rusia 2018. Es la primera baja para el Mundial. Daniel era parte del equipo mundialista.

Sencillo y carismático narrador deportivo de la nueva generación (quienes no conocieron a ‘Pocho’ o al ‘Veco’). “No hay mal que dure 36 años ni fútbol peruano que lo resista”, fue la frase que nos llevó a Rusia, la narración de aquel día quedará eternamente en la memoria del Perú.

El de las locuciones ingeniosas e inolvidables. Hoy inmortales: “Un gol más va a haber”, “los palos son así, a veces juegan para el delantero otras para el arquero”, “la tocó, la tocó”, “ha ganado bien”, “cuando no se puede jugando… la pelotita parada”, “paren bien las orejas”, “algún día tenía que ser” (triunfo de Perú en Quito de visitante).

En 2008, perennizó el gol de empate de Fano a Argentina tras kilométrica corrida de Vargas en el Monumental (“con los huevos de Vargas”…).

Hincha incondicional de la selección, trabajó en Cristal, para él Cueto fue el mejor jugador peruano que vio, pero era hincha de la ‘U’ de ‘Lolo’.

“Un gol más ‘NO’ habrá…”, narrado con su voz, pero seguirá vivo para el Perú futbolero, su alma se fue, su corazón se queda entre nosotros.

Hasta siempre, Daniel Peredo, “goooool, gol, gol, gol, gol... peruanoooo”… Gloria en las alturas por siempre.