Aire acondicionado, ventiladores, trabajo y escuela

Hace unos años y con motivo de otro episodio El Niño; también en este periódico; comenté acerca de la fecha del inicio de clases ante un verano especialmente abrumador de calor.

El verano de 2019 en Lima, si nos atenemos a los valores de temperatura que estamos midiendo, es de los tres más cálidos del siglo XXI. El asunto es que los otros dos fueron en 2016 y 2017. Ya no podemos pensar atrasar las clases por el calor; hay que combatirlo porque se hace más regular.

Perú necesita estudiar por sobre todo. Trabajar también. ¿Por qué solo preocuparnos de los estudiantes en el calor? ¿Qué hay de los ciudadanos? Hoy, si quieres tener una licencia de funcionamiento, te piden extinguidores, señales y cuanta parafernalia hay por si acaso llegase a ocurrir algo que quizá no ocurra. Lo que sí ocurre todos los años y crecientemente, además, es la cantidad de días de extremo calor.

Pues bien, sugiero obligar a los lugares donde se trabaja y donde se enseña a que, en los meses de verano, nuestros educandos y nuestros trabajadores puedan hacerlo productivamente y no en un sauna.

Los equipos de aire acondicionado y ventiladores son más económicos que nunca y más eficientes en consumo eléctrico, además.