[Opinión] Javier Alonso de Belaunde: Refugio inseguro. (Foto: Renzo Salazar/GEC)
[Opinión] Javier Alonso de Belaunde: Refugio inseguro. (Foto: Renzo Salazar/GEC)

Migraciones estuvo a punto de expulsar a Venezuela a la activista antichavista y de derechos humanos Paulina Facchin. Felizmente, a última hora, el director Emerson Romero reparó en las obligaciones asumidas por nuestro país frente a la comunidad internacional y declaró nula la orden de expulsión. No se puede devolver a un extranjero a un país donde correría peligro. Esta saludable rectificación no debe tapar el sospechoso caso. ¿El gobierno o algunos de sus funcionarios están colaborando con la dictadura venezolana? Urge una investigación.

Facchin llegó al Perú en el 2011 luego de sufrir un atentado en Venezuela en el que su hija resultó herida de bala. En ese país se desempeñaba como abogada de un medio opositor al gobierno. En Perú ha sido una voz destacada de denuncia de los abusos cometidos por los regímenes de Chávez y Maduro. En 2019, Caretas le confirió el premio Resistencia por su defensa de los derechos de los migrantes. Una historia de valía que pudo ser cortada hace unos días. De la persecución totalitaria a las miserias de cierta burocracia peruana.

Como explican las especialistas Elizabeth Salmón y Crisbeth Vigo, el principio de no devolución es considerado por la Corte Interamericana como un derecho de toda persona extranjera, independientemente de su condición migratoria (2021, pp. 89-92). Prohíbe expulsar o devolver extranjeros a territorios donde su vida, libertad o integridad estén en riesgo. Todo funcionario de migraciones debería saberlo y también que en Venezuela se violan sistemáticamente las libertades. De hecho, con denuncia peruana, la fiscalía de la Corte Penal Internacional actualmente investiga la posible comisión de crímenes de lesa humanidad en Venezuela. ¿Hubo incompetencia o mala fe en Migraciones?

El expediente sancionador sigue abierto. El atropello podría repetirse. Es necesario que la Defensoría continúe con su valioso monitoreo, que el Poder Judicial emita órdenes de no repetición en el hábeas corpus iniciado para cuestionar a Migraciones y, en general, que toda persona interesada por la causa de los derechos y la democracia siga con atención el caso. El Perú tiene un destino mayor. No puede terminar de peón de una dictadura.