notitle
notitle

Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

No, en realidad, no. Alonso Segura no ha renunciado y seguirá siendo el ministro de Economía, como se encargó de aclarar él mismo y luego su jefe –al menos en el papel–, el premier Pedro Cateriano.

Y esto es un alivio, porque Segura es necesario, una suerte de garantía para un sector importante, como lo fue Julio Velarde y, sobre todo, Luis Miguel Castilla, antes que aquel.

Por eso, es muy interesante que se señale con tanto énfasis la inacción del gobierno como causa principal de la desaceleración económica sin aludir a los ministros de Economía. Esta proclividad a responsabilizar a Humala y compañía de la próxima pequeña crisis, cuando claramente se trata de un asunto global, va muy cerca de aquella otra idea sonsa y groseramente falsa según la cual este gobierno es de izquierda. Y, otra vez, sin mirar a sus dos ministros más importantes e influyentes y que son tan rojos como podría serlo un apio. ¿Cuáles son las grandes medidas izquierdistas del gobierno de Humala? ¿La ley de AFP? ¿La de la carrera pública? ¿La fallida 'ley Pulpín'? ¿La refinería de Talara? ¿La resolución para mandar a la Mocha García Naranjo a Montevideo? ¿Mandar a Javier Diez Canseco a morirse a su casa tras una acusación falsa?

Estemos claros: no ha habido en este gobierno ningún ministro con el alcance, poder e influencia de Castilla (que hasta entrevistaba a los pretendientes a ministro y "sugería" viceministros en otras carteras). Segura, aún con un perfil más bajo, tampoco tiene contrapesos importantes y su palabra pesa, y mucho. Ambos tienen opinión vinculante sobre todas las decisiones de todos los sectores desde que empezó el gobierno y ninguno de los dos es de izquierda. Entonces, ¿cuál es ese gobierno rojo que fregó las cosas?