Luis Davelouis: Lavandería de activos II

Es muy extraño que en campaña la Sra. Fujimori haya proclamado su firme compromiso con la lucha contra la corrupción (hasta pacto de honor firmó) y específicamente con el fortalecimiento de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y que el martes en la noche su bancada haya dicho "ahorita no, joven".

Si fuera suspicaz pensaría que algo quieren ocultar, pues varios fujimoristas tienen dificultades para explicar sus patrimonios. Algunos son investigados por lavado de activos, como el Sr. Joaquín Ramírez, ex secretario general de Fuerza Popular y financista de la campaña de la Sra. Fujimori. Y está el extraño aporte de US$64,800 que FP recibió del Liberty Institute en 2015: según La República, la CEO de esa ONG negó haber realizado tal donación. La ONPE le pidió a la UIF que investigara, pero no pudo.

Desde el Apra apoyan la negativa de permitirle al Ejecutivo reforzar a la UIF porque, según Mauricio Mulder, el Pleno puede hacerlo. El Sr. Mulder se debe acordar –porque estuvo allí– que esto está pendiente desde hace, al menos, 12 años y que desde entonces ningún Pleno quiso reforzarla.

El Ejecutivo quiere que la UIF: i) tenga acceso al secreto bancario y a la reserva tributaria con autorización judicial (para no violar la Constitución); ii) pueda compartir información con órganos afines nacionales e internacionales; iii) incluya el crowdfunding, las apuestas deportivas y juegos por Internet, y a estudios de abogados en la vigilancia; iv) sugiera modificaciones a la norma de acuerdo a estándares internacionales; y v) registro la propiedad final de las acciones de personas jurídicas.

"Que levanten el secreto bancario sería peligrosísimo", dijo Cecilia Chacón. ¿Para quién es peligrosísimo? Eso y más en la tercera entrega.