Luis Davelouis: Doble estándar “chileno”

Muchos se indignan ante las declaraciones de los jugadores chilenos tras el partido en el que ese país nos ganó 4-3 de visitante. Tras el triunfo, uno de ellos dijo: "Son unos ordinarios, les dimos una lección", en alusión a las pifias de la hinchada al himno nacional sureño. Más tarde, apareció la fotografía de una pinta en el que habría sido el camerino de los chilenos en el Estado Nacional, que decía: "Respeto!!! Por aquí pasó el campeón de América!!!".

No entiendo por qué se ofenden. En ninguna de las dos citas hay insulto y, en la primera, lo que hay es una reacción a una clara falta de respeto, que nos escandaliza a nosotros mismos cuando vamos a cualquier otro país a jugar. "Lo hace todo el mundo", dirá alguno. Esa debe de ser la excusa más vieja, infantil y estúpida de todas, una que da un niño de tercer grado a su papá cuando empieza a repetir en su casa las palabrotas que aprendió a decir en el colegio.

¿El hincha peruano y el periodista peruano que se portan como unos energúmenos esperan grandeza y empatía de aquellos a quienes agreden? Nunca había visto una portada de diario que se felicite por la lesión sufrida por algún jugador del equipo rival. "¡Qué bueno, James se hizo daño y no juega!".

Como los argentinos hinchas de cuarta que se quejaban de haber sido insultados y humillados por los alemanes en el Mundial cuando los barristas albicelestes precarizaron de maneras indecibles no solo los estadios (a los que no podían entrar), sino muchas calles de las ciudades de Brasil en las que jugaba su selección. Francamente.

Trata al prójimo como esperas ser tratado. Y si no, no te quejas, saca su garrote no más.

Nos vemos en la pista. Mariposita.