"La posible candidatura de De Soto por Avanza País, entre otras, evidencia que la élite empresarial está más dividida que la izquierda local", sostiene Rey. (Foto: GEC)
"La posible candidatura de De Soto por Avanza País, entre otras, evidencia que la élite empresarial está más dividida que la izquierda local", sostiene Rey. (Foto: GEC)

El mercado de pases electorales está quemando, en parte porque demasiados creen que la mejor forma de realizar sus ambiciones personales es persiguiendo la presidencia del país, algo que se ve nítidamente entre los contendores a la representación de la derecha empresarial peruana en la que el ruleteo de candidatos es obsceno y casi endogámico.

Las posibles candidaturas de Roque Benavides por el Apra y de su primo Fernando Cillóniz por Todos por el Perú, sumadas a las de Hernando de Soto por Avanza País y López Aliaga por Solidaridad Nacional, parecen una guerra entre clones y evidencian que la élite empresarial está más dividida que la izquierda local. En parte, esto ocurre porque la institucionalidad política no existe y todos se sienten el elegido. Además, inspirados por el primer gobierno de Piñera en Chile, la derecha corporativa está apostando por la autorrepresentación, algo que Julio Cotler ya veía venir desde 2014. El factoring político ya no les funciona tan bien como antes, así que no piensan seguir tercerizando ese trabajo. Por eso Keiko ya no es una opción. Ahora necesitan a alguien del club.

Detrás de estas candidaturas también existe la utopía del presidente CEO, como si la experiencia PPK no hubiese dejado en claro que la caja de herramientas y habilidades que se necesitan para gobernar un país no es la misma que se requiere para liderar una corporación y traer calma a la junta general de accionistas.

Una guerra de clones no promete ningún éxito, salvo para los contrincantes, si logran usar la oportunidad para diferenciarse. Esto tampoco beneficia a Keiko, como algunos creen, pues es a ella a quien le quitarían votos con el consecuente riesgo de dejarla sin posibilidad de pasar a segunda vuelta. Mientras tanto, Forsyth, Acuña, Urresti y Mendoza, la que podrá diseñar un discurso contra ese frente, toman vuelo en una campaña que ya está por comenzar.