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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Las imputaciones de la ex procuradora (y hoy congresista) Yeni Vilcatoma sobre la actuación del ex ministro de Justicia Daniel Figallo son muy serias. En el epicentro se encuentra un documento que le envía la Procuraduría a la empresa Odebrecht solicitándole información sobre quien habría sido un colaborador de la empresa, Paul Varas Valverde. El oficio, enviado a la empresa, solo tiene dos copias: el que recibe la empresa, y el cargo que regresa a la Procuraduría. Pero de pronto, en una reunión, el ex ministro Figallo sostiene que "Odebrecht pone y saca presidentes", y él mismo presenta dicho oficio. Por supuesto, no era copia del cargo; era, por necesidad, copia del documento recibido de la empresa. La pregunta obvia es: ¿cómo llegó hasta el despacho ministerial?

El ex ministro Figallo sostiene que le llegó a su oficina sin sello, firma o cualquier otro tipo de seña. Eso es inverosímil; nadie en su sano juicio y con un mínimo de honestidad puede creerse esa versión. Ningún documento puede aparecer en un despacho: pasa primero por varios filtros, donde en la mayoría (si no todos) se van estableciendo cargos con nombres, hora y fecha.

La presencia de dicho documento es indudable: el ministro ya la aceptó. Tampoco es creíble la versión de la mágica aparición, lo cual nos lleva, inevitablemente, a suponer que la recibió de la empresa. Y si fue así, no cabe duda de que el ex ministro Figallo mantuvo algún tipo de cercanía con la misma. ¿Por qué? Muy simple: proteger a quienes, desde el gobierno, operaban con la misma en distintos frentes. Los casos en los que se encuentra involucrado Martín Belaunde Lossio con los gobiernos regionales y la empresa Odebrecht, para empezar.

El ex procurador Christian Salas ha confirmado los elementos centrales de la denuncia de la congresista Vilcatoma. ¿Por qué no actúa la justicia con celeridad sobre el ex ministro Figallo? ¿Cuándo empezará la Fiscalía a actuar como actúa su par brasileña? ¿Cuánto más de este teatrín seguiremos aguantando a cuentagotas?