“Lobos solitarios” judiciales

La semana que pasó, el lunes 2 de noviembre, la bella ciudad de Viena en Austria, cuna de Johan Strauss, autor de las obras “El murciélago”, “Sangre vienesa” y “El bello Danubio azul”, entre otras, fue cruelmente castigada por un lobo solitario de ISIS o Estado Islámico o Dáesh, asesinando a mansalva a cuatro personas e hiriendo a 22 en las pacíficas y hermosas calles de esta ciudad. Nuestras condolencias a sus familias y compatriotas.

Desde 2014, ISIS inició operaciones militares en Iraq para instaurar un califato (modo de gobierno político religioso que data del año 632), con crímenes salvajes en Medio Oriente, Europa, Canadá, EE.UU. Las informaciones de inteligencia internacional dan cuenta de que ISIS está presente en algunos países de Sudamérica como Brasil, Perú y Argentina; asimismo, la organización terrorista internacional de origen libanés Hezbollah (o partido de dios) es responsable de innumerables y crueles atentados contra posiciones americanas e israelíes. Sus “operativos” (como lobos solitarios) están desperdigados en todo el mundo, y también, en el Perú.

Después de la caída de las torres gemelas en NY (EE.UU.), el 11 de setiembre de 2001, la ONU, el 28 SET, emitió la poderosa Resolución 1373 (2001) (desconocida por jueces peruanos) que aprobó el Consejo de Seguridad. En la resolución, deciden que los Estados firmantes luchen contra el terrorismo internacional, bloqueando fondos, prohíbe que los Estados los financien, dispone que se intercambie información de inteligencia y operacional y que se ASEGURE el enjuiciamiento de los terroristas imponiéndoles las sanciones correspondientes.

El 31 de octubre, Amet Aguirre, de esta casa periodística (Perú21), reveló que el Poder Judicial liberó al investigado Muhamad Galeb Hamdar, un libanés considerado operativo de Hezbollah, quien tenía rastros de dinamita en sus pertenencias y fotos relacionadas a los Activos Críticos Nacionales, y “aflojaron” los candados de Brian Alvarado, ciudadano peruano que fue detenido en 2019 por sus nexos con ISIS, considerado, además, un lobo solitario, quien en nombre de ISIS, habría pretendido atropellar con un camión a deportistas en olimpiadas de 2019. Los peligrosos sujetos hoy caminan libres por las calles del Perú, aullando en silencio.

Nuestros aliados estratégicos los EE.UU. e Israel han empezado a levantar la ceja de preocupación por la fragilidad y renuencia del sistema judicial peruano en aplicar la Resolución 1373 ONU, dado que, si son víctimas de un atentado por estos sujetos, se comprometerían seriamente las relaciones internacionales del Perú. Es hora de que los jueces estrenen su “criterio de conciencia” y dejen de actuar como “lobos solitarios” contra el sistema de justicia peruano, siendo “más papistas que el Papa”, tomando decisiones judiciales sin temor, correctas, para proteger a nuestros ciudadanos. La pusilanimidad judicial podría convertirse en letal en un futuro no muy lejano. ¡Cuidado!