Jeffrey Radzinsky: Tremenda huelga

Una de las protestas sociales más importantes del Perú en varios años no encontró apropiado manejo político ni tecnocrático por parte del Ejecutivo. Se suma la evidente falta de protagonismo del ministro de Trabajo y la bancada de PPK, a la que correspondería contribuir de manera orgánica y más activa con los lineamientos gubernamentales.

Por otro lado, la actuación de Fuerza Popular ha sido deplorable. Improductivos mensajes, inútiles preguntas en comisiones del Congreso (similar el Frente Amplio) a ministros Martens y Basombrío, falta de propuestas concretas y negativa a participar en reuniones a las que asistieron las otras representaciones parlamentarias darían la impresión de preferir los ataques al Gobierno sobre la educación de millones de escolares.

Hace un mes, mientras la mayoría ciudadana respaldaba los reclamos de los maestros, Pedro Castillo emergía mediáticamente como líder. El ahora conocido Castillo se ha posicionado entre sus colegas, aunque es cuestionado por un gran sector de la población, debido a su rechazo a los procesos de evaluación de desempeño y la Ley de Carrera Magisterial. El 84% apoya la evaluación para ingresar y ascender en la carrera, 83% cree que las evaluaciones son para capacitar a docentes y no para despedirlos (GfK, agosto de 2017).

Los políticos no deberían esperar a la próxima campaña electoral para confrontar a Castillo. También toca enfrentar políticamente al Movadef; recordando su programa y vinculaciones con Sendero Luminoso, en un país donde miles de adultos no saben quién es Abimael Guzmán. Rescatando algo positivo del drama nacional vivido, quedan mejores sueldos y beneficios para maestros, manteniendo la opción de despedir a aquellos que, luego de ser capacitados, desaprueben por tres veces las correspondientes evaluaciones. Incrementar sueldos era y sigue siendo necesario, eliminar sanciones por el fracaso reiterado en evaluaciones es absurdo.