Infamia

En Historia universal de la infamia, el escritor Jorge Luis Borges recrea biografías de personajes que cometieron actos infames. “El espantoso redentor Lazarus Morell” ayudaba a escapar a los esclavos de las plantaciones del Mississippi para luego revenderlos; “El tintorero enmascarado Hákim de Merv” era un falso profeta que construyó su propio culto con base en engaños; y así. Si Borges viviera, tal vez encontraría inspiración en nuestro país para agregar un relato.

En medio de la mayor crisis sanitaria de los últimos tiempos, responsable de la muerte de más de 100 mil peruanos y peruanas, el expresidente Vizcarra, un grupo de funcionarios y sus familiares se habrían aplicado dosis de la vacuna por fuera del ensayo oficial. Un acto de tal naturaleza que se tuvo que realizar en la clandestinidad. Publicitado, de acuerdo con el principio constitucional de transparencia, probablemente habría generado un debate que terminara con un mejor destino para varias de esas dosis.

Parece que estamos ante la vieja práctica de saltarse la cola blandiendo privilegios, con la gravedad del momento. “Este método es único, no solamente por las circunstancias sui géneris que lo determinaron, sino por la abyección que requiere, por su fatal manejo de la esperanza y por el desarrollo gradual, semejante a la atroz evolución de una pesadilla”, escribe Borges.

Frente a esta situación, existen herramientas parlamentarias pertinentes. Pero preocupa el uso irrazonable y desproporcionado que se les ha dado en el pasado. El Congreso debe evitar ser el elefante en la cristalería y producir un mayor daño. Sería nefasto, por ejemplo, que el escaso personal de salud termine desatendiendo sus labores para acudir a citaciones o que se interfiera en futuras negociaciones y entregas de vacunas. Mesura y responsabilidad.

Gran pena la muerte del profesor Javier Neves, lector de Borges y otra ausencia prematura por la pandemia. Precisamente, se afanaba en recordar que la virtud está en quien “quiere lo mejor no solo para él y su familia, sino también para su pueblo y su país”. Mis condolencias a sus amigos y familiares.