"Hoy, la marca PPC está por los suelos"

Raúl Castro,Presidente del PPCAutor: Carmen Mendoza Arana.cmendoza@peru21.com

Lejos de quedarse callado, como se lo reclaman dirigentes y congresistas del PPC, Raúl Castro arremete contra un sector de pepecistas y denuncia lo que llama "una guerra fratricida", la cual, dice, no comenzó ahora, sino hace más de dos años.

¿Qué está pasando con el PPC después de las elecciones?No es lo que está pasando luego de las elecciones, sino durante los últimos dos años y diez meses, desde el momento en que yo gané las elecciones internas, hecho que todavía no es asimilado por ciertas personas.

¿Dice que los llamados "reformistas", los que perdieron las elecciones internas, le han hecho la vida imposible?Exactamente. Han tratado de hacerme la vida imposible.

¿Para Ud., esto perjudicó el papel del PPC en las municipales?Sin lugar a dudas. No puedo admitir que hayan saboteado la campaña de Jaime Zea, y esto lo denuncio públicamente y algunas personalidades del partido también deberían denunciar y no salir a los medios, con una ingenuidad que refleja una falta de realismo o de ubicación, a decir que estos problemas se deben ventilar internamente cuando lo real y concreto es que, a través de las redes sociales, se ha pretendido destruir al partido, destruir la candidatura de Zea y destruir a la dirigencia y al presidente.

¿A qué mensajes en las redes y a quiénes se refiere?No daré nombres. Aquellos ingenuotes que salen a declarar lo que han declarado o simplemente no la ven por ningún lado o no entienden de rangos y jerarquías.

Justamente Javier Bedoya deploró su actitud…No son temas internos, señorita. Está en boca de los periodistas. El señor Bedoya está completamente equivocado y lo que debería hacer es, si no está enterado, enterarse y, como corresponde a toda persona de bien, llamar la atención a quienes han cometido estas atrocidades.

Hay un evidente malestar. El regidor Jorge Villena lo llamó lloricón, dijo que usted es el responsable del resultado, que el cargo le queda grande y que se resiste a la renovación…Yo no voy a comentar los extravíos del señor Villena. Ahí lo dejo.

¿Por qué no menciona directamente de quienes se trata?Lo voy a mencionar en los estamentos partidarios.

¿Pedirá la expulsión de quienes lo denuncian o que sean sometidos a Ética del PPC?Esto lo verán al interior del partido. Creo que hace rato Ética debería haber tomado cartas en el asunto, porque esto es una falta de respeto y de tolerancia y de buenos tratos democráticos que no se puede permitir en ningún partido.

Rafael Yamashiro (secretario del PPC) dijo que hay que extirpar a algunos militantes gangrenados. ¿Coincide con él?Evidentemente, pero no soy el que va a operar la gangrena. Hay gente con vocación mesiánica a la que no le importa destruir el partido porque siente que serán los salvadores. Eso se llama infantilismo suicida, anarquismo utópico, locura que esconde ambiciones personales.

La imagen del PPC es la de un partido destruido…Es una imagen falsa.

Usted mencionó que se sentía satisfecho con los resultados de las elecciones, ¿se ratifica?Hay una cosa indiscutible: peleando frente a una alcaldesa que tenía todos los recursos a la mano y frente a un ex alcalde por ocho años, hemos quedado como la segunda fuerza política de Lima. Después de Solidaridad tenemos más distritos.

¿Pero no le dolió perder Pueblo Libre y Jesús María?Claro que sí, pero nos dolió más por los vecinos, porque los que perdieron son alcaldes exitosos.

¿Que le faltó a Jaime Zea?, ¿por qué no pegó su candidatura?Primero, hubo dispersión de votos por la cantidad enorme de candidatos. Segundo, Jaime no era una persona muy conocida pese a haber sido alcalde de Villa El Salvador. Ningún partido resiste el escándalo del señor (Pablo) Secada, la guerra interna fratricida que hemos sufrido, todo el fundamentalismo y el talibanismo que los amigos y defensores de Secada y el mismo señor Secada desarrollaron en contra del partido, al señalar, por ejemplo, que estamos gobernados por una mafia o que el partido está lleno de mequetrefes.

¿Para usted ellos son responsables de lo que pasa en el PPC?Yo no he dicho eso. Yo he dicho que hay una campaña de sabotaje que ha contribuido a presentar al PPC como un partido dividido y estas personas que usted ha señalado y otras más han impulsado que esa imagen se grabe en la opinión pública y nos perjudique tremendamente. Yo, el año pasado, logré llevar la marca PPC al 20% de aceptación. Hoy, después de todo lo vivido internamente, la marca está por los suelos, debido a las barbaridades que no han sido ocasionadas por la dirigencia.

¿Qué les diría a los que piden su renuncia? ¿Renunciará al cargo?No. Desde que asumí intentaron 'golpes de Estado'. Yo no tengo ningún apego al poder. Si estoy acá, es porque los fundadores me lo pidieron. Estoy cumpliendo un rol y soy consciente de eso y lo defenderé a como dé lugar.

El PPC tiene solo un regidor en Lima. ¿Qué errores reconoce?No haber tenido bien estructurada la Secretaría de Lima, que estaba en manos de la oposición. Demoramos en definir la estrategia de campaña.

AUTOFICHA

- "No dejé solo a Jaime Zea. El resultado es una combinación de factores, como la polarización entre Villarán y Castañeda, el voto de castigo a Villarán que se concentró en el ex alcalde de Lima. También nuestros propios errores, los pleitos internos y los escasos recursos".

- "Fuimos a un proceso interno, nos desangramos, nos desgastamos económicamente y, cuando llegamos a la campaña, todos estaban cansados y gastados, y los perdedores, masivamente, se dedicaron a atacar a los ganadores, a impugnarlos".

- "Considero que ha habido un exceso de tolerancia y de democracia en el partido y las personas, en lugar de entender eso, decidieron abusar en aras de su conveniencia política. Que yo sea tolerante y democrático no significa de manera alguna que sea tonto".