César Hinostroza fue detenido en España esta madrugada. (Perú21)
César Hinostroza fue detenido en España esta madrugada. (Perú21)

La semana pasada, de la manera más inverosímil posible, el ex magistrado Hinostroza Pariachi se escapó de la justicia de nuestro país a través del calmo puesto fronterizo que divide a nuestro territorio del Ecuador. Algunos vuelos después, el principal protagonista de los audios de la vergüenza estaba en Madrid y planteó inmediatamente una solicitud de asilo político. El Estado peruano, imperdonablemente lerdo a la hora de permitir su huida, reaccionó –no se debe ser mezquino–: hizo todo lo que pudo e incluso el presidente Vizcarra conversó con el jefe del Gobierno español para ponerlo al corriente de los hechos.

Aunque tarde, los resortes de la justicia se han echado a andar para evitar que Hinostroza concrete su objetivo de quedarse por tierras europeas. Ayer, el Poder Judicial acogió el pedido fiscal y le dio 36 meses de prisión preventiva. En el sustento, se dio cuenta de las declaraciones de otro miembro de la red criminal, el detenido ex presidente de la Corte del Callao, Walter Ríos. Él se encargó de develar el rol real de Hinostroza: cabecilla de Los Cuellos Blancos.

Sin embargo, queda todavía por delante un burocrático y engorroso proceso en el que el Perú deberá prepararse. Deberá enviar a España un cuadernillo jurídico con los argumentos que sostienen el pedido de la extradición que los ciudadanos del Perú esperamos. El Estado peruano tiene en este caso la oportunidad y la obligación de demostrar que lo que ha cometido Hinostroza en el Perú fueron delitos, que encabezó una red mafiosa que pervirtió el sistema de justicia y que tenía como propósito tomar a corto plazo el control total del Poder Judicial y de la Fiscalía.

El abogado de Hinostroza Pariachi ha dado luces de que recurrirán a todo tipo de leguleyadas para bloquear el objetivo de poner tras las rejas al ‘hermanito’. Primero, quiso aplazar la audiencia de ayer con el argumento de que tenía poco tiempo en la defensa y, luego, cuestionó que se le haya incluido a su patrocinado el delito de organización criminal –el más grave de todos– en el Pleno del Congreso (y no en la Comisión Permanente). Es a este tipo de maniobras a las que deberíamos estar atentos, en especial quienes tendrán a su cargo la extradición.

TAGS RELACIONADOS