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Redacción PERÚ21

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Fritz Du Bois,La opinión del directordirector@peru21.com

Al menos esa sería la causa según nuestro ministro del Interior, para quien no tendríamos problemas si estuviéramos en medio de una recesión y la gente estaría tan pobre que los delincuentes no tendrían nada que robarles. De esa forma, las estadísticas de crímenes disminuirían y el gobierno no estaría apremiado tratando de evadir la responsabilidad por su fracaso.

Más aun, pensándolo bien, una economía estancada también produciría más pobres que se convertirían en clientes para los innumerables programas asistenciales que el gobierno está creando. Incluso el mensaje de inclusión del gobierno tendría más sentido en un país con una población sin aspiración y que estaría esperando sobrevivir gracias a los regalos de 'Papá' Estado.

Así que, por donde lo veamos, parece que el crecimiento económico es incómodo dentro del esquema ideológico de muchos de los que nos están gobernando.

Todo lo cual no hace sino reforzar la necesidad de renovar a un equipo ministerial que tiene varios miembros que están evidentemente cansados y que no tienen imaginación para tratar de encontrar una solución a los problemas que estamos enfrentando. Por ello se pasan el tiempo buscando excusas para tratar de explicar el motivo por el cual no lo han logrado.

En realidad, la incapacidad en mejorar la seguridad pese a contar con recursos presupuestales adecuados demuestra lo indispensable que es llevar a cabo una reforma policial y para ello se requiere alguien con convicción a cargo.

Al final, los países más seguros del mundo son los más ricos o desarrollados, mientras que el nivel de violencia en Somalia, uno de los lugares más pobres del planeta, sería inexplicable dentro de esa absurda teoría de que la generación de riqueza es la causa de los problemas de los peruanos.