(Foto: Sin parar Huancayo)
(Foto: Sin parar Huancayo)

-En nuestro país pareciese que no hubiera cosa más vital que solo concentrarnos, machacona y exclusivamente, más que en un larguísimo y casi circense escandelete político-judicial (con un morbo pasional que se retroalimenta entre medios y público) mientras también suceden otras cosas, de muchísimo impacto fiscal y poca atención mediática.

Por ejemplo, otra torpeza más de este Congreso fue haber aprobado esta demente ley sobre la negociación colectiva estatal. No solo se va a poder perforar así el presupuesto público en cualquier momento del año por el lado de las exigencias laborales, sino también los arbitrajes sobre negociación colectiva estatal ahora podrán otorgar obligatoriamente beneficios económicos y con rango de ley (una norma en colisión directa con la ley de presupuesto, dicho sea de paso). Como es de esperar, los sindicatos se buscarán a sus árbitros rojicaviares y el cielo será el límite monetario en esos laudos, pagando el sufrido contribuyente los laudos para los trabajadores y las suculentas costas para los abogados (porque se pagan en función de los montos obtenidos). Revisen laudos pasados y verán que el Estado siempre pierde y paga mucho. Es que los políticos y abogados siempre inventan o amplían “derechos”, que obviamente pagarán otros –¡jamás ellos!– con sus impuestos. No estoy tan seguro de que el MEF pueda convencer a Vizcarra de observar esta irresponsabilidad, dado que el ministro de Trabajo –un abogado rojimio que pertenece a la manchita de Neves Mujica y Villavicencio en la PUCP– está a favor. Además, Vizcarra sufre de “encuestafilitis”.

-Un piloto de carreras orinando a un patrullero en los Caminos del Inca sintetiza el nulo respeto que se le tiene a la Policía en nuestro “país”. ¡Qué problemas hubiera tenido en USA, España o Chile!