Estos son los incidentes revelados por el fiscal José Domingo Pérez a su superior, Rafael Vela. (Foto: GEC / Video: Canal N)
Estos son los incidentes revelados por el fiscal José Domingo Pérez a su superior, Rafael Vela. (Foto: GEC / Video: Canal N)

Me sorprendieron mucho estas recientes reflexiones del columnista marxista Mirko Lauer en “3-D” de LR, ante un incómodo AAR, que trataba infructuosamente de defender a los desairados fiscales, tras esta revelación desde Ecuador de que Odebrecht había coimeado mucho más de lo revelado por ese acuerdo fiscal:

“La impresión que da no es que no es que el acuerdo esté en peligro. Las bases lógicas y judiciales del acuerdo están en peligro (…) La sensación es que, en realidad, los fiscales han preguntado sobre aquello que Odebrecht ha querido que le pregunten. Esa es la figura. Y entonces si es que no ha querido que les pregunten sobre algo, entonces los fiscales no han preguntado. ¿Cuán co-responsables son ellos, con Odebrecht, de que esta situación se haya producido? (…) de pronto, para salvar el acuerdo habría que sacrificar a los fiscales (AAR ríe nerviosamente) (…) las dudas que estamos expresando, de alguna manera, nacen de la actuación de ellos (los fiscales). O sea, de pronto, como ocurre con los gabinetes ministeriales y otros, fiscales, igual de buenos, (…) Frescos, podrían dar un aire nuevo a este asunto. ¿No es cierto? Incluso, un aire anticorruptivo. ¿No es cierto? No tiene por qué ser un triunfo fujimorista, ni nada por el estilo (…) ¡Carambas! Todas las investigaciones vienen del Brasil. Y ahora, las que han aparecido, vienen del Ecuador. (Rospigliosi le pregunta ¿Qué se ha descubierto acá?) (…) Casi nada, pues… (…) Entonces también hay allí también un tema de… ¿Qué significa ‘investigar’ en la fiscalía peruana, no? Es un negocio de importación, que te llega de Brasil o Ecuador y se lo pasas a una publicación. Entonces, eres una especie de intermediario (…)”.