El juez supremo César San Martín pidió disculpas públicas por haber pedido apoyo a Walter Ríos en un proceso que involucraba a su familia. (Foto: USI)
El juez supremo César San Martín pidió disculpas públicas por haber pedido apoyo a Walter Ríos en un proceso que involucraba a su familia. (Foto: USI)

"(…) Lamentablemente para ellos, tengo de parte una gran red de personas, de miembros del Poder Judicial y sociedad civil, y estoy continuamente apoyado e informado" (declaraciones del vocal supremo César San Martín a la radio de la ONG IDL. 21/2/14). A confesión de parte, relevo de prueba.

¡El mismo CSM se jactó públicamente así de 'su gran red' caviar! Por eso no es para sorprenderse toda esta 'Operación Limpieza' que hemos visto en estos días sobre su audio, desde la defensa abierta (AAR ayer en LR) o la abierta condena leve ('es solo una falta') hasta el silencio, pasando por la cobardía de muchos penalistas, que escamotean su delito porque no quieren pelearse con un juez que ve muchos de sus casos.

En un canal se transmite de segmento 'imparcial' a un dúo Ronald Gamarra/Avelino Guillén como evaluadores de CSM, le comparan con Paniagua y desempolvan a Pedro Cateriano de escudero. O abogados tuiteros caviares que le instan a pedir perdón. Y CSM ha tenido a su favor expresiones de congresistas que odian tanto a los fujimoristas que prefieren relativizar los actos de San Martín (Del Castillo, Quintanilla, Vitocho, Glave, Montenegro, etc.) solo porque este es enemigo jurado de ellos; ninguno le exige la renuncia, que es lo que amerita.

Pero el problema es que el 'pecadillo' es delito. Como bien explica el penalista Enrique Ghersi, ese audio revela un claro tráfico de influencias. ¡Se 'presiona' a una jueza! ¡Su proceso solo dura tres meses! ¡Se lo despachan incluso un día domingo! ¡El juez Ríos sabía desde antes el número de expediente! ¡No jodan estos congresistas, abogados y coleguitas con que NO hay tráfico de influencias! ¡Dr. Ugaz, no se le escucha opinar! De locuaz a silente... Dígale a CSM que dimita y que regrese al Estudio Ugaz, donde trabajó por años.