“Las cifras definitivas de crecimiento dependerán del desarrollo de la pandemia, la vacunación global, la efectividad de la vacuna y su impacto en la salud y la economía”. 
 (Foto: Andina)
“Las cifras definitivas de crecimiento dependerán del desarrollo de la pandemia, la vacunación global, la efectividad de la vacuna y su impacto en la salud y la economía”. (Foto: Andina)

Tras un 2020 que consternó al planeta por la pandemia, impactando en la economía y la salud, el escenario económico dependerá, en buena medida, del control que se tenga de la misma y de la vacunación global.

Como cada año, hay factores de riesgo y hechos que pueden ocurrir. Los economistas pronostican que tras un pésimo 2020, la economía mundial crecerá en 2021 –por efecto rebote y mejora del entorno de negocios– cerca de 4% o 5% (China 7.1% y USA 4.2%). Las cifras definitivas de crecimiento dependerán del desarrollo de la pandemia, la vacunación global, la efectividad de la vacuna y su impacto en la salud y economía. Pero preocupa la mutación del COVID. Otros factores que influirán en la economía mundial son el crecimiento de China y Asia, estímulos en USA, las políticas de Biden, Europa y Gran Bretaña tras el Brexit.

En Latinoamérica, el desempleo ha impactado, generando más pobreza. En Perú, el ingreso per cápita volvería a niveles preCOVID recién en 2024-2025. La región cayó 7.3% y se prevé un crecimiento de 3.6% en 2021. Las proyecciones de crecimiento están ligadas a la problemática de la vacunación y los desafíos logísticos.

El virus está reconfigurando nuestra existencia posvacuna. Un aspecto relevante para la economía será el impacto en los hábitos de consumo y en los centros comerciales, turismo y entretenimiento. También se vislumbra afectación del mercado inmobiliario, el avance del teletrabajo y teleeducación, y el efecto de la nueva ola tecnológica. Ojalá 2021 sea un año de rebote sin rebrote. Las perspectivas para Perú no son tan optimistas por las demoras en vacunación y un calendario electoral que genera incertidumbre.