Foto: USI.
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Autor: Ricardo Monzón Kcomt.rmonzon@peru21.com

El ministro Daniel Figallo está en jaque. Desde el Congreso piden su renuncia luego de la supuesta presión que habría ejercido contra la ex procuradora anticorrupción adjunta Yeni Vilcatoma para que Martín Belaunde pueda acogerse a la colaboración eficaz. Avelino Guillén, ex fiscal supremo, se suma al pedido.

Para usted, ¿qué ocurrió en este caso?Hubo un acto de persuasión que estuvo llevando a cabo el ministro (Figallo). Ha tratado de convencer a la procuradora de que el señor Belaunde Lossio no tiene la condición de cabecilla de una red criminal, ha actuado como su abogado.

¿Cuál es su análisis de la actitud del ministro de Justicia?Esta actuación lo descalifica como ministro de Estado y lo pone fuera del cargo, pues tiene la obligación, como alto funcionario del Estado, de representar jurídicamente al Poder Ejecutivo. Asesora al presidente en temas de Derecho, pero aquí ha actuado como un defensor de los derechos de Belaunde. Además, el ministro actuó con conocimiento de que el Ministerio Público iba a acoger el pedido de que Belaunde sea colaborador eficaz.

¿Quiere decir que, antes de la comunicación del ministro Figallo con la ex procuradora Vilcatoma, coordinó con el Ministerio Público?Lo que quería era convencer a la señora (Vilcatoma) para que no se oponga a este beneficio premial (colaboración eficaz), porque el procurador se puede oponer e inclusive puede apelar. Yo presumo que él (Figallo) manejaba información de que el Ministerio Público iba a dar trámite a la colaboración eficaz y quería convencer a su gente dentro del Ministerio de Justicia para que no apele.

¿El despido de Vilcatoma juega a favor de Belaunde?El retiro de una persona que cuenta con el conocimiento, experiencia y antigüedad, como la ex procuradora Vilcatoma, obviamente acusa una merma, una debilidad (en favor de Belaunde). Pero creo que, por encima de las personas, se tiene que rescatar el trabajo en equipo. La lucha contra la corrupción no es un trabajo en solitario, es una responsabilidad colectiva.

Vilcatoma presentó una denuncia a la Contraloría y asegura que, mientras no emita un pronunciamiento, no pueden despedirla…Si ha presentado una denuncia por escrito, en ese sentido no podría ser despedida. Tendría que esclarecerse el ámbito de su denuncia porque ella, como denunciante, merece la protección de los organismos encargados de esclarecer estos hechos. El Estado está obligado a proteger a las personas que, dentro de una dependencia pública, denuncian hechos como los que ella ha denunciado.

¿Su despido es ilegal?No procedería su despido. Si después se argumenta que todo lo que denunció es falso, sí procedería. Pero, mientras no se diga eso, es un despido arbitrario, ilegal.

¿También es ilegal que haya grabado al ministro?No es de carácter delictivo. Habría que esclarecer bien los hechos, pero hay que tener en cuenta que ya hay antecedentes. En los 'vladivideos', la persona graba a otro y, como forma parte de la grabación, brinda autorización de lo que se está grabando. No habría un reproche de carácter penal porque él también se está grabando.

¿El ministro quiso favorecer a Belaunde Lossio?Trató de convencer de que Martín Belaunde no es cabecilla de una red criminal. Ha pretendido favorecer la situación de Belaunde Lossio porque, si a un cabecilla lo ponen como colaborador eficaz, lo estás favoreciendo.

¿Por qué el asesor presidencial Roy Gates tendría interés en este tema?Eso acrecienta las dudas de que es bastante probable que la pareja presidencial está muy preocupada por la forma en que vienen ocurriendo los hechos y cómo se vienen llevando las investigaciones. En mi concepto, Roy Gates no ha debido estar en esa reunión. La procuradora puede dar información al ministro de Justicia, pero no a Roy Gates. Es irregular, inapropiado, impertinente, y es una intromisión arbitraria en el desempeño funcional de un procurador.

¿Qué piensa del respaldo del presidente Humala al ministro Figallo?Estas muestras de respaldo solo aumentan la crisis. Creo que el señor Figallo no tiene salida. No hay forma de argumentar a su favor. No encuentro cómo respaldarlo. Es indefendible su posición. Diríamos que es un ministro sin coartada, no hay escape. Él, por su propia iniciativa, se puso fuera del cargo.

¿La persuasión del ministro Figallo fue por encargo del presidente Ollanta Humala?Lo que se conoce es que Belaunde ha sido muy amigo de la pareja presidencial. Ellos tienen que dar una explicación clara y directa a la opinión pública, le deben una explicación al país. Tienen que hacer un deslinde claro y concreto respecto a esta persona. Si no, se van a acrecentar los rumores y sospechas.

¿Qué espera del nuevo procurador, Joel Segura?Lo conozco y es un buen cuadro. Ha trabajado en el Poder Judicial y espero que mantenga una línea de independencia, de autonomía, y haga respetar su fuero, y, cuando sea objeto de una presión, salga a denunciarlo con firmeza. Tengo confianza en él.

AUTOFICHA

- "Soy abogado y participé como fiscal superior adjunto en el juicio contra el ex presidente Alberto Fujimori. Mi participación me permitió ser reconocido como una de las 100 personalidades del año 2008, según una publicación que hizo el diario El País de España".

- "Martín Belaunde no puede ser colaborador eficaz porque es uno de los cabecillas de la red criminal de Áncash. Tuvo su propia red y actuaba a nivel nacional en gobiernos regionales. No reúne la calificación jurídica para acogerse a esta figura".

- "Cuando uno se acoge a la colaboración eficaz, de acuerdo a las normas del Código Procesal Penal, hay una serie de beneficios premiales. Es lo que ocurrió con la señora Matilde Pinchi Pinchi. Te reducen la pena y hasta puedes quedar exento de prisión".