Permanecer unidos a la distancia
Permanecer unidos a la distancia

Por Sergio Rincón - Presidente de Backus

Backus, la cervecería del Perú, no está produciendo ni distribuyendo cerveza desde que entraron en vigencia las medidas de aislamiento social obligatorio. Sin embargo, nuestras capacidades y toda nuestra energía y creatividad están dispuestas a contribuir y a aumentar la resiliencia de nuestra sociedad ante la difícil situación que vivimos. Hablo en nombre propio y en el de todos los trabajadores que día a día le damos sentido al propósito de nuestra compañía: “unir a la gente por un mundo mejor”.

Hemos empezado trabajando a partir de tres prioridades. La primera es el agua. Nuestro equipo de logística y producción ha conseguido, muy rápidamente, poner a disposición de esta gran batalla contra el coronavirus, el agua. La misma que usábamos para la producción de cerveza, la estamos entregando en más de un millón de botellas a todos los que ahora más la necesitan. Ya hemos entregado un lote de 200,000 botellas al jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, el teniente general FAP Carlos Chávez Cateriano. Y el jueves pasado también dimos otras miles de botellas a la Policía Nacional del Perú y al hospital de Ate, donde irán los pacientes más graves a causa del COVID-19.

A ello sumamos el acceso gratuito a nuestras plantas para que las entidades públicas que lo necesiten puedan llenar sus cisternas y hemos hecho entregas en Pucallpa, Cusco, Motupe y Ate. También hemos puesto a disposición toda el agua que sea necesaria para surtir en el futuro el hospital de Ate y seguiremos contribuyendo con quienes nos lo soliciten.

Nuestra segunda prioridad son las medidas sanitarias y de higiene. En otros países, las plantas de AB InBev, la empresa matriz de Backus, pudieron reconvertirse en productoras de alcohol en gel para la higiene de manos y eso hicieron de inmediato. Pero en el Perú, el perfil productivo de nuestras instalaciones no nos permite hacer esa reconversión, así es que nuestra naturaleza inconformista nos llevó a buscar aliados para lograrlo por otro camino. Nos negamos a quedarnos de brazos cruzados. Con orgullo, hoy puedo decir que nos hemos unido a la Asociación Peruana de Agroindustriales del Azúcar y Derivados, Caña Brava y San Miguel Industrias, y ya hemos logrado envasar en conjunto 37 mil litros de alcohol que donaremos a EsSalud.

Nuestra tercera prioridad, cada día más urgente, son nuestros cientos de miles de socios y socias en las bodegas de todo el Perú. La vorágine que esta situación ha creado ha permitido que el Estado no se detenga en analizar el sufrimiento por el que pasan estos emprendimientos. Mientras cumplen con su responsabilidad de seguir abriendo sus puertas para abastecer a sus clientes, no tienen acceso a productos muy importantes para la economía de sus negocios, ya sea porque no se están produciendo o porque la distribución es muy complicada dadas las restricciones a la movilidad, indispensables en la situación actual. Más de 2.5 millones de personas dependen económicamente de estos emprendimientos familiares y la gran mayoría tiene un alto riesgo de tener, muy pronto, problemas financieros.

Para nosotros las bodegueras y bodegueros siempre han sido una prioridad, por eso estamos ayudándolos con una línea gratis y exclusiva de atención de consultas médicas, kits de higiene y mucha información sobre cómo protegerse personalmente y a su negocio. Además, les estamos dando facilidades de pago, pero, desgraciadamente, eso no es suficiente.

Necesitan de la atención y la unión de todos, tanto desde el sector privado como desde las autoridades, de otra manera no podrán mantenerse a flote. Por nuestra parte, no cejaremos en nuestro compromiso con ellos y haremos hasta lo imposible para seguir avanzando, invitando a otros actores a sumarse a la batalla de sacar a flote a los pequeños comerciantes del Perú.

Estamos separados físicamente y seguiremos así por el tiempo que sea necesario, pero también estamos más unidos que nunca. Priorizaremos la salud, crearemos, si es necesario, nuevas formas de trabajo y no abandonaremos a las bodegueras y bodegueros de nuestro maravilloso y aguerrido país. Tenemos un propósito que es más grande que cualquier distancia. Saldremos de esta fortalecidos para seguir uniendo a la gente por un Perú y un mundo mejor.