(Foto: Congreso)
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Si bien la pandemia del ha golpeado con dureza a los países de Latinoamérica, sorprende notar que el más afectado será el Perú, ya que la economía peruana se contraerá en 12% este año, a pesar de contar con un plan de reactivación equivalente al 17% del Producto Bruto Interno (). La razón de ello es que los dos poderes del Estado encargados de atender la crisis están tomando decisiones erráticas.

Por un lado, el Poder Legislativo está en una cruzada intervencionista sin precedentes. Los actuales congresistas causaron que Fitch Ratings baje de categoría al Perú, por aumentar el riesgo de endeudamiento y empeorar el clima de negocios con sus iniciativas. A pesar de ello, no se han moderado, puesto que pretenden pedir facultades para investigar y sancionar a los miembros de los organismos reguladores y cambiar las reglas de juego de mercados altamente regulados. Todo esto solo puede terminar mal.

Mira: Vicente Zeballos: “Inversión pública será preponderante en reactivación económica”

Por otro lado, el Ejecutivo está tomando una posición equivocada de cara a impulsar la economía, lo cual se hace evidente al analizar las posturas del primer ministro sobre diversos temas. Por ejemplo, en lugar de pelear por la mesura en el Congreso frente a la iniciativa de regular los precios de bienes esenciales, Vicente Zeballos se mostró a favor de esa iniciativa, pese a que la evidencia es abrumadora sobre los problemas que genera dicha política. Evidentemente, para el premier la ideología pesa más que la razón.

Pese a estar a la deriva, veo muy poca conciencia ciudadana sobre las decisiones que están tomando nuestras autoridades. Estamos cerca de llegar a un punto de no retorno y podemos retroceder décadas en materia de desarrollo.

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