La Molina pide un bypass en el óvalo Monitor. (Maps)
La Molina pide un bypass en el óvalo Monitor. (Maps)

El anuncio de la Municipalidad de Lima de un paso a desnivel sobre el óvalo Monitor ubicado en la avenida Javier Prado sorprendió a muchos, pues la obra planteada tiene un objetivo que se contradice con la política de movilidad urbana sostenible de la gestión del alcalde Muñoz. La explicación a este despropósito estaría en que esta obra es una de las que inició la gestión anterior (muy dada a implementar infraestructura vial desproporcionada) y que recién ahora está lista para ser ejecutada.

El óvalo Monitor tiene muchos problemas que causan la congestión que sufren quienes pasan por ahí. Por ejemplo, el diseño del óvalo mismo y la geometría vial son malos, no hay gestión vial apropiada y el corredor complementario no tiene carril exclusivo ni se ha liberado la vía de la competencia de otras rutas de transporte. El servicio de transporte público no satisface a los usuarios que eligen otras opciones, entre ellas los colectivos informales.

Sin embargo, un paso a desnivel no es lo que resolvería los flujos de esta intersección, pues trasladaría la congestión a otros puntos de la vía y, como dice el ingeniero David Fairlie, los semáforos no serían útiles para contener el flujo de autos que saldría de la infraestructura vial. Pero no solo este es el problema. Los peatones han sido, por supuesto, absolutamente ignorados en esta “solución”, pero, peor aún, a los conductores de los vehículos tampoco se les ofrece una solución integral. Como prueba de eso está el resumen ejecutivo de la obra que incluye como indicador de éxito el incremento de la velocidad de los autos sin considerar otros factores como la seguridad vial o la fluidez. La velocidad por la velocidad no es lo que necesitamos.

El paso a desnivel costaría S/75.6 millones, casi 10 millones más que los indicados en el portal de invierte.pe hace unos días y si su utilidad ya es discutible, su diseño es absurdo. Plantea un viaducto de dos carriles para recibir un flujo de 5 carriles en uno de sus extremos. ¿No creen que ahí se formará un cuello de botella?

Por supuesto que debemos resolver el trancón. Para ello un estudio de alternativas determinaría cuáles son las medidas que deben implementarse para no solo generar fluidez para los conductores sino también las mejores condiciones para los peatones y el entorno urbano. Semaforización apropiada, rediseño de las calles, gestión vial y medidas para mejorar el transporte público no solo podrían resolver el problema sino que costarían una fracción del monto presupuestado para el paso a desnivel y beneficiaría a muchas más personas. ¿Qué creen que es lo que debería hacerse en el óvalo Monitor?