Hace unos días, un ciudadano publicó en X (Twitter) un video en que les pide a tres policías de tránsito que intervengan un vehículo que se ha estacionado sobre la vereda. Esta persona se acerca a hacer la denuncia de la infracción y la respuesta que recibe por parte de la autoridad policial es una actitud de hartazgo y patanería. No solo minimiza la denuncia, sino que empieza a increparle la validez de su reclamo. “¿Quién es usted?”, le pregunta, a lo cual el denunciante responde que simplemente “es un ciudadano”. También replica: “¿Acaso es dueño de la casa?”, disminuyendo la preocupación del vecino, quien insiste en indicarle que deberían hacer su trabajo y multar al conductor de dicho auto. A pesar de que el denunciante le habla con firmeza y exige que cumplan con su trabajo, la Policía le pide que se retire argumentando una falta de respeto.